Los jacobinos (Del francés jacobin; propiamente 'dominico', por celebrar sus reuniones en un convento de dominicos, y este derivado del latín Iacobus 'Jacobo', por alusión al hospicio de peregrinos de Santiago de Compostela del que se encargaban estos religiosos1 ) eran los miembros del grupo político de la Revolución francesa llamado Club de los Jacobinos, cuya sede se encontraba en París, en el convento de Saint Jacques (San Jacobo) de los frailes dominicos.
Eran republicanos, defensores de la soberanía popular, propugnaban el sufragio universal, su visión de la indivisibilidad de la nación los llevaba a defender un estado centralizado. Se confunden a menudo con El Terror, en parte debido a la leyenda negra que divulgó la reacción termidoriana sobre Robespierre. En el siglo XIX, el jacobinismo fue la fuente de inspiración de los partidos republicanos que promovieron la Segunda y la Tercera República Francesa. En la Franciacontemporánea, este término se asoció con una concepción centralista de la República.
Los jacobinos (Del francés jacobin; propiamente 'dominico', por celebrar sus reuniones en un convento de dominicos, y este derivado del latín Iacobus 'Jacobo', por alusión al hospicio de peregrinos de Santiago de Compostela del que se encargaban estos religiosos1 ) eran los miembros del grupo político de la Revolución francesa llamado Club de los Jacobinos, cuya sede se encontraba en París, en el convento de Saint Jacques (San Jacobo) de los frailes dominicos.
Eran republicanos, defensores de la soberanía popular, propugnaban el sufragio universal, su visión de la indivisibilidad de la nación los llevaba a defender un estado centralizado. Se confunden a menudo con El Terror, en parte debido a la leyenda negra que divulgó la reacción termidoriana sobre Robespierre. En el siglo XIX, el jacobinismo fue la fuente de inspiración de los partidos republicanos que promovieron la Segunda y la Tercera República Francesa. En la Franciacontemporánea, este término se asoció con una concepción centralista de la República.