Primera regla: las partes involucradas en la argumentación no deben crearse impedimentos en la posibilidad de expresar dudas o reservas.
Segunda regla: Quien expresa una opnión debe estar dispuesto a defenderla si se lo piden.
Tercera regla: Un ataque a una argumentación debe centrarse en la tesis que ha enunciado el protagonista, sin desviar el discurso, sin presentar la tesis de forma diferente y sin actuar de forma que se le atribuya al antagonista una tesis diferente de la que se sostiene.
Cuarta regla: Una tesis debe defenderse sólo con argumentos relacionados con ella y que no tengan imbricaciones con otra.
Quinta regla: Una persona debe aceptar las consecuencias y la existencia de las premisas que deja implícitas y, en consecuencia, debe aceptar que se le ataque en el terreno de éstas.
Sexta regla: Una tesis puede considerarse defendidad de forma adecuada si se basa en artumentos pertenecientes a un punto de partida común.
Séptima regla: Una tesis puede considerarse defendida de forma adecuada si la defensa se desarrolla con el uso de argumentos que reflejan y respectan la práctica de la argumentación honesta.
Octava regla: Los argumentos usados en una discusión deber ser o haber devenido válidos, haciendo explícitas algunas de las premisas que quedaban implícitas.
Primera regla: las partes involucradas en la argumentación no deben crearse impedimentos en la posibilidad de expresar dudas o reservas.
Segunda regla: Quien expresa una opnión debe estar dispuesto a defenderla si se lo piden.
Tercera regla: Un ataque a una argumentación debe centrarse en la tesis que ha enunciado el protagonista, sin desviar el discurso, sin presentar la tesis de forma diferente y sin actuar de forma que se le atribuya al antagonista una tesis diferente de la que se sostiene.
Cuarta regla: Una tesis debe defenderse sólo con argumentos relacionados con ella y que no tengan imbricaciones con otra.
Quinta regla: Una persona debe aceptar las consecuencias y la existencia de las premisas que deja implícitas y, en consecuencia, debe aceptar que se le ataque en el terreno de éstas.
Sexta regla: Una tesis puede considerarse defendidad de forma adecuada si se basa en artumentos pertenecientes a un punto de partida común.
Séptima regla: Una tesis puede considerarse defendida de forma adecuada si la defensa se desarrolla con el uso de argumentos que reflejan y respectan la práctica de la argumentación honesta.
Octava regla: Los argumentos usados en una discusión deber ser o haber devenido válidos, haciendo explícitas algunas de las premisas que quedaban implícitas.