InesMS
Nglaterra, alrededor del año 1500. En una zona de Cumbria, de valles verdes y rebaños de ovejas, unos pastores descubren un gigantesco depósito de grafito.
Desde luego, ellos no lo llaman grafito: ese nombre no llegará hasta 1789, de la palabra griega graphien, “escribir”. En 1500, esa roca negruzca y brillante parece algo similar al plomo, de modo que en la época lo llaman plumbago, “mena de plomo”, y también plomo negro.
Desde luego, ellos no lo llaman grafito: ese nombre no llegará hasta 1789, de la palabra griega graphien, “escribir”. En 1500, esa roca negruzca y brillante parece algo similar al plomo, de modo que en la época lo llaman plumbago, “mena de plomo”, y también plomo negro.