José Rafael de Pombo y Rebolledo (Bogotá, República de la Nueva Granada, 7 de noviembre de 1833 – Bogotá, Colombia, 5 de mayo de 19124 ) fue un escritor, poeta, fabulista, traductor, intelectual y diplomático colombiano.
Lino de Pombo O'Donell y Ana María Rebolledo,5 ambos pertenecientes a familias de la aristocracia de Popayán. Cuando el General Francisco de Paula Santander designó a Lino de Pombo como secretario de Relaciones Interiores y Exteriores, éste aceptó y viajó desde Popayán con su familia a Bogotá. Al llegar la familia a Bogotá, Ana María Rebolledo tenía nueve meses de embarazo, dando pues en poco tiempo a luz a su primogénito José Rafael de Pombo.
Doña Ana enseñó a Rafael las primeras letras. A la edad de once años ingresó en el Seminario. El estudio del latín hizo de él un diestro traductor de los clásicos. Marcelino Menéndez Pelayo opinó acerca de sus traducciones: "No las hay más valientes y atrevidas en nuestra lengua". De los poetas greco-latinos tradujo el episodio de Laoconte de Virgilio y a Horacio. También vertió al castellano "El poeta moribundo", de Alphonse de Lamartine, y el soliloquio del Hamlet de Shakespeare.
Índice [ocultar] 1Regreso a Colombia2Homenaje y muerte3Legado4Principales obras infantiles5Algunas otras obras conocidas6Referencias7Enlaces externos
José Rafael de Pombo y Rebolledo (Bogotá, República de la Nueva Granada, 7 de noviembre de 1833 – Bogotá, Colombia, 5 de mayo de 19124 ) fue un escritor, poeta, fabulista, traductor, intelectual y diplomático colombiano.
Lino de Pombo O'Donell y Ana María Rebolledo,5 ambos pertenecientes a familias de la aristocracia de Popayán. Cuando el General Francisco de Paula Santander designó a Lino de Pombo como secretario de Relaciones Interiores y Exteriores, éste aceptó y viajó desde Popayán con su familia a Bogotá. Al llegar la familia a Bogotá, Ana María Rebolledo tenía nueve meses de embarazo, dando pues en poco tiempo a luz a su primogénito José Rafael de Pombo.
Doña Ana enseñó a Rafael las primeras letras. A la edad de once años ingresó en el Seminario. El estudio del latín hizo de él un diestro traductor de los clásicos. Marcelino Menéndez Pelayo opinó acerca de sus traducciones: "No las hay más valientes y atrevidas en nuestra lengua". De los poetas greco-latinos tradujo el episodio de Laoconte de Virgilio y a Horacio. También vertió al castellano "El poeta moribundo", de Alphonse de Lamartine, y el soliloquio del Hamlet de Shakespeare.
Índice [ocultar] 1Regreso a Colombia2Homenaje y muerte3Legado4Principales obras infantiles5Algunas otras obras conocidas6Referencias7Enlaces externos