se presenta después de que un óvulo ha sido expulsado de un folículo. Los quistes ováricos funcionales son diferentes de tumores de ovario o quistes debido a afecciones relacionadas con las hormonas, como el síndrome de ovario poliquístico.
La mayoría de los quistes de ovario se producen a raíz del ciclo menstrual (quistes funcionales). Otros tipos de quistes son mucho menos frecuentes.
Quistes funcionales
En los ovarios normalmente crecen estructuras similares a los quistes, llamadas ´´folículos´´, todos los meses. Los folículos producen las hormonas estrógeno y progesterona, y liberan un óvulo cuando ovulas.
Si un folículo normal continúa creciendo, se denomina «quiste funcional». Existen dos tipos de quistes funcionales:
Quiste folicular. Aproximadamente en la mitad del ciclo menstrual, un óvulo sale de su folículo y viaja por la trompa de Falopio. Un quiste folicular comienza cuando el folículo no se rompe ni libera el óvulo, sino que continúa creciendo.
Quiste del cuerpo lúteo. Cuando un folículo libera el óvulo, comienza a producir estrógeno y progesterona para la concepción. El folículo se llama ahora «cuerpo lúteo». A veces, se acumula líquido dentro del folículo, lo que provoca que el cuerpo lúteo se expanda y se forme un quiste.
Los quistes funcionales son generalmente inofensivos, rara vez provocan dolor, y suelen desaparecer por sí solos en dos a tres ciclos menstruales.
Otros quistes
Los tipos de quistes que no están relacionados con el funcionamiento normal del ciclo menstrual son:
Quistes dermoides. Estos quistes, que también se denominan «teratomas», pueden contener tejido, como cabello, piel o dientes, porque se forman a partir de células embrionarias. No suelen ser cancerosos.
Cistoadenomas. Se forman en la superficie de un ovario y pueden estar llenos de un material acuoso o mucoso.
Endometriomas. Se forman a raíz de una enfermedad en la que las células endometriales uterinas crecen fuera del útero (endometriosis). Parte del tejido se puede adherir al ovario y formar un bulto.
Los quistes dermoides y los cistoadenomas se pueden agrandar, lo que puede provocar que el ovario se desplace de su posición. Esto aumenta la posibilidad de que se produzca una torsión dolorosa del ovario, llamada «torsión ovárica». La torsión ovárica también puede producir una disminución o la detención del flujo sanguíneo hacia el ovario.
se presenta después de que un óvulo ha sido expulsado de un folículo. Los quistes ováricos funcionales son diferentes de tumores de ovario o quistes debido a afecciones relacionadas con las hormonas, como el síndrome de ovario poliquístico.
Causas
Quiste folicular en el ovario
Quiste folicular
Quiste de cuerpo lúteo en el ovario
Quiste del cuerpo lúteo
La mayoría de los quistes de ovario se producen a raíz del ciclo menstrual (quistes funcionales). Otros tipos de quistes son mucho menos frecuentes.
Quistes funcionales
En los ovarios normalmente crecen estructuras similares a los quistes, llamadas ´´folículos´´, todos los meses. Los folículos producen las hormonas estrógeno y progesterona, y liberan un óvulo cuando ovulas.
Si un folículo normal continúa creciendo, se denomina «quiste funcional». Existen dos tipos de quistes funcionales:
Quiste folicular. Aproximadamente en la mitad del ciclo menstrual, un óvulo sale de su folículo y viaja por la trompa de Falopio. Un quiste folicular comienza cuando el folículo no se rompe ni libera el óvulo, sino que continúa creciendo.
Quiste del cuerpo lúteo. Cuando un folículo libera el óvulo, comienza a producir estrógeno y progesterona para la concepción. El folículo se llama ahora «cuerpo lúteo». A veces, se acumula líquido dentro del folículo, lo que provoca que el cuerpo lúteo se expanda y se forme un quiste.
Los quistes funcionales son generalmente inofensivos, rara vez provocan dolor, y suelen desaparecer por sí solos en dos a tres ciclos menstruales.
Otros quistes
Los tipos de quistes que no están relacionados con el funcionamiento normal del ciclo menstrual son:
Quistes dermoides. Estos quistes, que también se denominan «teratomas», pueden contener tejido, como cabello, piel o dientes, porque se forman a partir de células embrionarias. No suelen ser cancerosos.
Cistoadenomas. Se forman en la superficie de un ovario y pueden estar llenos de un material acuoso o mucoso.
Endometriomas. Se forman a raíz de una enfermedad en la que las células endometriales uterinas crecen fuera del útero (endometriosis). Parte del tejido se puede adherir al ovario y formar un bulto.
Los quistes dermoides y los cistoadenomas se pueden agrandar, lo que puede provocar que el ovario se desplace de su posición. Esto aumenta la posibilidad de que se produzca una torsión dolorosa del ovario, llamada «torsión ovárica». La torsión ovárica también puede producir una disminución o la detención del flujo sanguíneo hacia el ovario.
Espero te sirva.