Todo comienza en la Gran Inauguración del Centro de Medicina Geriátrica, en donde el Dr. Hibbert presenta a Ben Matlock ante la multitud de ancianos. Sin embargo, luego de ver a su ídolo sufrir un ataque cardíaco, el Abuelo Simpson se asusta ante la posibilidad de morir y redacta un testamento: a Lisa le deja su colección de correspondencia, y a Homer y a la familia, una caja de viejos dólares de plata. La familia toma el dinero y se va al centro comercial.
En el centro comercial, Lisa ve la nueva muñeca Stacy Malibu en una juguetería. Luego de insistirle, Marge le compra la muñeca. La niña se pone cada vez más ansiosa por saber qué decía la muñeca parlante, pero se decepciona al escuchar sólo frases sexistas, como "Y ahora vamos a olvidar nuestros problemas con un gran platón de helado de vainilla", "Si te preocupas mucho, te arrugas" y "No me preguntes, sólo soy una chica. ¡Ja, ja, ja!". Al escuchar esas frases, Lisa se indigna y arroja su muñeca por la ventana.
Lisa se enoja ya que nadie, aparte de ella, puede ver cuán estúpida es la muñeca. Un día, llama a la empresa para quejarse, y luego va a la misma con Marge. Allí, ve un video sobre la Stacy Malibú, y nota también cuán machistas eran los trabajadores de la compañía.
Lisa y el Abuelo, más tarde, se empiezan a quejar de sus edades: ella, por ser pequeña, y el Abuelo, por ser anciano. Luego de esto, la niña decide buscar a la creadora de la muñeca, y, el Abuelo, conseguir un trabajo.
Lisa visita a Smithers, dueño de la mayor colección de muñecas Stacy Malibú del mundo, para que la ayude a encontrar a Stacy Lovell, la creadora de las muñecas. Lisa luego va a la residencia de la dama, quien, al oír lo que decía la muñeca, la deja pasar a su casa de inmediato. Lisa y Stacy Lovell deciden crear una nueva muñeca, cuya voz sea grabada por Lisa. La muñeca se hace, y Kent Brockman dedica un reportaje entero a hablar sobre ella. Sin embargo, los empresarios de Stacy Malibú ven a la muñeca de Lisa como una competencia, y planean sacar del mercado a Lisa Corazón de León.
Mientras tanto, el Abuelo trabaja en Krusty Burger, en donde no le va muy bien. Pronto se enoja con sus jefes y renuncia, uniéndose luego a un grupo de ancianos que se quejaban de que la carne, por ejemplo, era muy dura.
En la juguetería, cuando se presenta la muñeca de Lisa, muchas niñas (y Smithers) van corriendo a comprarla, pero un carrito conteniendo las nuevas muñecas Stacy Malibú, las mismas pero con un sombrero nuevo, se interpone en el camino. Lisa trata de convencerlas de que la única novedad era el sombrero, pero a las niñas no les importa y compran las muñecas. Todas excepto una pequeña niña, quien adquiere un ejemplar de Lisa Corazón de León, dándole a Lisa la ilusión de que todo había valido la pena.
Todo comienza en la Gran Inauguración del Centro de Medicina Geriátrica, en donde el Dr. Hibbert presenta a Ben Matlock ante la multitud de ancianos. Sin embargo, luego de ver a su ídolo sufrir un ataque cardíaco, el Abuelo Simpson se asusta ante la posibilidad de morir y redacta un testamento: a Lisa le deja su colección de correspondencia, y a Homer y a la familia, una caja de viejos dólares de plata. La familia toma el dinero y se va al centro comercial.
En el centro comercial, Lisa ve la nueva muñeca Stacy Malibu en una juguetería. Luego de insistirle, Marge le compra la muñeca. La niña se pone cada vez más ansiosa por saber qué decía la muñeca parlante, pero se decepciona al escuchar sólo frases sexistas, como "Y ahora vamos a olvidar nuestros problemas con un gran platón de helado de vainilla", "Si te preocupas mucho, te arrugas" y "No me preguntes, sólo soy una chica. ¡Ja, ja, ja!". Al escuchar esas frases, Lisa se indigna y arroja su muñeca por la ventana.
Lisa se enoja ya que nadie, aparte de ella, puede ver cuán estúpida es la muñeca. Un día, llama a la empresa para quejarse, y luego va a la misma con Marge. Allí, ve un video sobre la Stacy Malibú, y nota también cuán machistas eran los trabajadores de la compañía.
Lisa y el Abuelo, más tarde, se empiezan a quejar de sus edades: ella, por ser pequeña, y el Abuelo, por ser anciano. Luego de esto, la niña decide buscar a la creadora de la muñeca, y, el Abuelo, conseguir un trabajo.
Lisa visita a Smithers, dueño de la mayor colección de muñecas Stacy Malibú del mundo, para que la ayude a encontrar a Stacy Lovell, la creadora de las muñecas. Lisa luego va a la residencia de la dama, quien, al oír lo que decía la muñeca, la deja pasar a su casa de inmediato. Lisa y Stacy Lovell deciden crear una nueva muñeca, cuya voz sea grabada por Lisa. La muñeca se hace, y Kent Brockman dedica un reportaje entero a hablar sobre ella. Sin embargo, los empresarios de Stacy Malibú ven a la muñeca de Lisa como una competencia, y planean sacar del mercado a Lisa Corazón de León.
Mientras tanto, el Abuelo trabaja en Krusty Burger, en donde no le va muy bien. Pronto se enoja con sus jefes y renuncia, uniéndose luego a un grupo de ancianos que se quejaban de que la carne, por ejemplo, era muy dura.
En la juguetería, cuando se presenta la muñeca de Lisa, muchas niñas (y Smithers) van corriendo a comprarla, pero un carrito conteniendo las nuevas muñecas Stacy Malibú, las mismas pero con un sombrero nuevo, se interpone en el camino. Lisa trata de convencerlas de que la única novedad era el sombrero, pero a las niñas no les importa y compran las muñecas. Todas excepto una pequeña niña, quien adquiere un ejemplar de Lisa Corazón de León, dándole a Lisa la ilusión de que todo había valido la pena.