Al principio de el confinamiento, creo que todo el mundo pensaba que sería durante unos meses o semanas, pero no fue así.
Yo me sentí un poco agobiada, ya que estar en casa sólo con mis padres y mi hermana sin poder salir a comer, comprar y cosas cotidianas pre-pandemia seguros, pronto me fui acostumbrando a la mascarilla y los guantes, que nos poníamos al salir a comprar.
Mis padres decían que saliese a la terraza a tomar el sol de vez en cuando pero me parecía inseguro, el mundo de fuera de mi hogar me era completamente inseguro, podía tener alguien Covid y yo no saberlo, hospitalizarme y sufrir.
Cuando comenzaron las clases virtuales, empecé a conocer las videollamadas y pude contactar con mis amigos. Pasado todo ese tiempo de videollamadas de clases, comenzamos a saber cómo anticipar los efectos del Covid-19 y lentamente comenzamos a cambiar nuestros hábitos de confinamiento, ahora yendo a clases presenciales. Aún a día de hoy, sigo teniendo un poco de miedo por la pandemia que sufríamos y sufrimos, ya que tener vacuna no quita el contagio.
Respuesta:
Okey
Explicación:
Al principio de el confinamiento, creo que todo el mundo pensaba que sería durante unos meses o semanas, pero no fue así.
Yo me sentí un poco agobiada, ya que estar en casa sólo con mis padres y mi hermana sin poder salir a comer, comprar y cosas cotidianas pre-pandemia seguros, pronto me fui acostumbrando a la mascarilla y los guantes, que nos poníamos al salir a comprar.
Mis padres decían que saliese a la terraza a tomar el sol de vez en cuando pero me parecía inseguro, el mundo de fuera de mi hogar me era completamente inseguro, podía tener alguien Covid y yo no saberlo, hospitalizarme y sufrir.
Cuando comenzaron las clases virtuales, empecé a conocer las videollamadas y pude contactar con mis amigos. Pasado todo ese tiempo de videollamadas de clases, comenzamos a saber cómo anticipar los efectos del Covid-19 y lentamente comenzamos a cambiar nuestros hábitos de confinamiento, ahora yendo a clases presenciales. Aún a día de hoy, sigo teniendo un poco de miedo por la pandemia que sufríamos y sufrimos, ya que tener vacuna no quita el contagio.