princess227Hernán Cortés nació en 1485 en Medellín de Extremadura, España. Sus padres fueron los hidalgos Martín Cortés y Catalina Pizarro. En su pueblo natal aprendió a leer y escribir. Aunque Hernán prefería ser soldado, por insistencia de sus padres ingresó a la Universidad de Salamanca para estudiar leyes. Pero en 1504, abandonó sus estudios para embarcarse en Sevilla rumbo al Nuevo Mundo. Al llegar a Santo Domingo, se puso al servicio de Diego de Velásquez y en 1511 lo acompañó en la conquista de Cuba. En 1518 Velásquez lo puso al mando de la expedición a la conquista de Yucatán (en México), pero sospechando una traición le revocó el encargo. Sin embargo, Hernán Cortés aceleró su partida y abandonó Cuba el 10 de febrero de 1519. Al llegar a Yucatán fundó su primera ciudad, Santa María de la Victoria. En tierras de los totonacas fundó la ciudad de Villa Rica de la Vera Cruz. Aquí se proclamó Capitán General, para obedecer solo al Rey, y no a Velásquez. El 16 de agosto de 1519, Hernán Cortés empezó la expedidición al interior de México con 400 españoles y 13 000 indígenas.
A mitad de camino logró el apoyo de los tlaxcaltecas, implacables enemigos de los aztecas. Al enterarse de esto el emperador Moctezuma II ordenó algunos ataques contra los españoles, pero no pudo evitar que Hernán Cortes llegue a Tenochtitlan el 8 de noviembre de 1519. A los pocos días Moctezuma fue hecho prisionero. A mediados de 1520 los aztecas se sublevaron y lograron expulsar a los cristianos en la madrugada del 1 de julio de 1520 ("La Noche Triste"). En Tlaxcala, Hernán Cortés organizó el retorno y después de varios meses de cruentos combates logró conquistar Tenochtitlán y capturar al último Huey Tlatoani, Cuauhtémoc, el 13 de agosto de 1521.
En 1529 viajó a España donde la Corona le otorgó el título de Marqués de Valle de Oaxaca. De regreso a México organizó nuevas expediciones a Tehuentepec, Baja California y Sinaloa. En 1540, volvió a España para gestionar nuevos títulos, pero tuvo que afrontar graves denuncias de sus enemigos. Lo acusaban de apoderarse de una parte del quinto real y de ordenar el asesinato de varios comisionados de la Corona. Instalado en el barrio de Castilleja de la Cuesta, cerca de Sevilla, el Conquistador de México falleció el 2 de diciembre de 1547MIRA ESPERO AYUDARTE
Conquistador español de México (Medellín, Badajoz, 1485 - Castilleja de la Cuesta, Sevilla, 1547). Procedente de una familia de hidalgos de Extremadura, Hernán Cortés estudió brevemente en la Universidad de Salamanca. En 1504 pasó a las Indias recién descubiertas por Colón y se estableció como escribano y terrateniente en La Española (Santo Domingo). Participó en la expedición a Cuba de 1511 como secretario del gobernador Diego Velázquez, con quien emparentó al casarse con su cuñada y que le nombró alcalde de la nueva ciudad de Santiago.
En 1518 Diego Velázquez confió a Hernán Cortés el mando de una expedición a Yucatán; sin embargo, el gobernador desconfiaba de Cortés, a quien ya había encarcelado en una ocasión acusado de conspiración, y decidió relevarle del encargo antes de partir. Advertido Cortés, aceleró la partida y se hizo a la mar antes de recibir la notificación (1519).
Hernán Cortés
Con once barcos, unos seiscientos hombres, 16 caballos y 14 piezas de artillería, Hernán Cortés navegó desde Santiago a Cozumel y Tabasco; allí derrotó a los mayas y recibió -entre otros regalos- a la india doña Marina, que le serviría como amante, consejera e intérprete durante toda la campaña.
Desobedeciendo órdenes expresas del gobernador Velázquez, fundó en la costa del golfo de México la ciudad de Villa Rica de la Veracruz. Allí tuvo noticias de la existencia del imperio azteca en el interior, cuya capital se decía que guardaba grandes tesoros, y se aprestó a su conquista.
Para evitar la tentación de regresar que amenazaba a muchos de sus hombres ante la evidente inferioridad numérica, Hernán Cortés hundió sus naves en Veracruz. Logró la alianza de algunos pueblos indígenas sometidos a los aztecas, como los toltecas y tlaxcaltecas. Tras saquear Cholula, llegó a la capital azteca, Tenochtitlán, en donde fue recibido pacíficamente por el emperador Moctezuma, que se declaró vasallo del rey de Castilla. La posible identificación de los españoles con seres divinos y de Cortés con el anunciado regreso del dios Quetzalcoátl favoreció quizá esta acogida a unos extranjeros que enseguida se empezaron a comportarse como invasores ambiciosos y violentos.
Entonces tuvo que dejar la ciudad a su lugarteniente Alvarado, para hacer frente a las tropas de Pánfilo de Narváez, enviadas por el gobernador Velázquez para castigar su rebeldía y devolverle a Cuba; Cortés los derrotó en Cempoala y consiguió que se uniese a él la mayor parte del contingente (1520). Cuando regresó a Tenochtitlán, encontró una gran agitación indígena contra los españoles a causa de los ataques realizados a sus creencias y símbolos religiosos y de la matanza de sus nobles por Alvarado para desbaratar una supuesta conspiración. Hizo prisionero a Moctezuma e intentó que éste mediara para calmar a su pueblo, sin lograr otra cosa que la muerte del emperador.
Finalmente, Cortés se vio obligado a abandonar Tenochtitlán en la llamada «Noche Triste» (30 de junio de 1520), en la que su pequeño ejército resultó diezmado. Refugiado en Tlaxcala, siguió luchando contra los aztecas -ahora bajo el mando de Cuauhtémoc-, a los que derrotó en la batalla de Otumba; y, finalmente, cercó y tomó Tenochtitlán (1521). Destruida la capital azteca, reconstruyó en el mismo lugar (una isla en el centro de un lago) la ciudad española de México. Dominado el antiguo imperio azteca, lanzó expediciones hacia el sur para anexionar los territorios de Yucatán, Honduras y Guatemala.
Los detalles de la conquista de México, así como los argumentos que justificaban las decisiones de Hernán Cortés fueron expuestos en las cuatro Cartas de relación que envió al rey. En 1522 fue nombrado gobernador y capitán general de Nueva España (nombre que dieron los conquistadores al territorio mexicano). Sin embargo, la Corona española -ya en manos de Carlos I- practicó una política de recorte de los poderes de los conquistadores, para controlar más directamente las Indias; funcionarios reales aparecieron en México enviados para compartir la autoridad de Cortés hasta que, en 1528, éste fue destituido y enviado a la Península.
En España salió absuelto de todas las acusaciones e incluso fue nombrado marqués del Valle de Oaxaca, además de conservar el cargo honorífico de capitán general, aunque sin funciones gubernativas. De vuelta a México en 1530, todavía organizó algunas expediciones de conquista, como las que incorporaron a México la Baja California (1533 y 1539).
Regresó nuevamente a España para intentar obtener mercedes de la Corona por los servicios prestados, para lo cual llegó a participar en una expedición contra Argel en 1540; pero sus reclamaciones nunca obtuvieron plena satisfacción. Se instaló en un pueblo cercano a Sevilla, en donde reunió una tertulia literaria y humanística. El conquistador de México, impulsado por un gran fervor religioso -aparte de la ambición de honores y riquezas común a todos los conquistadores-, fue un hombre culto y con preocupaciones morales inusuales en su entorno (como la de plantearse si era legítimo esclavizar a los indios).
Al llegar a Santo Domingo, se puso al servicio de Diego de Velásquez y en 1511 lo acompañó en la conquista de Cuba. En 1518 Velásquez lo puso al mando de la expedición a la conquista de Yucatán (en México), pero sospechando una traición le revocó el encargo. Sin embargo, Hernán Cortés aceleró su partida y abandonó Cuba el 10 de febrero de 1519. Al llegar a Yucatán fundó su primera ciudad, Santa María de la Victoria. En tierras de los totonacas fundó la ciudad de Villa Rica de la Vera Cruz. Aquí se proclamó Capitán General, para obedecer solo al Rey, y no a Velásquez. El 16 de agosto de 1519, Hernán Cortés empezó la expedidición al interior de México con 400 españoles y 13 000 indígenas.
A mitad de camino logró el apoyo de los tlaxcaltecas, implacables enemigos de los aztecas. Al enterarse de esto el emperador Moctezuma II ordenó algunos ataques contra los españoles, pero no pudo evitar que Hernán Cortes llegue a Tenochtitlan el 8 de noviembre de 1519. A los pocos días Moctezuma fue hecho prisionero. A mediados de 1520 los aztecas se sublevaron y lograron expulsar a los cristianos en la madrugada del 1 de julio de 1520 ("La Noche Triste"). En Tlaxcala, Hernán Cortés organizó el retorno y después de varios meses de cruentos combates logró conquistar Tenochtitlán y capturar al último Huey Tlatoani, Cuauhtémoc, el 13 de agosto de 1521.En 1529 viajó a España donde la Corona le otorgó el título de Marqués de Valle de Oaxaca. De regreso a México organizó nuevas expediciones a Tehuentepec, Baja California y Sinaloa. En 1540, volvió a España para gestionar nuevos títulos, pero tuvo que afrontar graves denuncias de sus enemigos. Lo acusaban de apoderarse de una parte del quinto real y de ordenar el asesinato de varios comisionados de la Corona. Instalado en el barrio de Castilleja de la Cuesta, cerca de Sevilla, el Conquistador de México falleció el 2 de diciembre de 1547MIRA ESPERO AYUDARTE
Hernán Cortés
Conquistador español de México (Medellín, Badajoz, 1485 - Castilleja de la Cuesta, Sevilla, 1547). Procedente de una familia de hidalgos de Extremadura, Hernán Cortés estudió brevemente en la Universidad de Salamanca. En 1504 pasó a las Indias recién descubiertas por Colón y se estableció como escribano y terrateniente en La Española (Santo Domingo). Participó en la expedición a Cuba de 1511 como secretario del gobernador Diego Velázquez, con quien emparentó al casarse con su cuñada y que le nombró alcalde de la nueva ciudad de Santiago.
En 1518 Diego Velázquez confió a Hernán Cortés el mando de una expedición a Yucatán; sin embargo, el gobernador desconfiaba de Cortés, a quien ya había encarcelado en una ocasión acusado de conspiración, y decidió relevarle del encargo antes de partir. Advertido Cortés, aceleró la partida y se hizo a la mar antes de recibir la notificación (1519).
Hernán Cortés
Con once barcos, unos seiscientos hombres, 16 caballos y 14 piezas de artillería, Hernán Cortés navegó desde Santiago a Cozumel y Tabasco; allí derrotó a los mayas y recibió -entre otros regalos- a la india doña Marina, que le serviría como amante, consejera e intérprete durante toda la campaña.
Desobedeciendo órdenes expresas del gobernador Velázquez, fundó en la costa del golfo de México la ciudad de Villa Rica de la Veracruz. Allí tuvo noticias de la existencia del imperio azteca en el interior, cuya capital se decía que guardaba grandes tesoros, y se aprestó a su conquista.
Para evitar la tentación de regresar que amenazaba a muchos de sus hombres ante la evidente inferioridad numérica, Hernán Cortés hundió sus naves en Veracruz. Logró la alianza de algunos pueblos indígenas sometidos a los aztecas, como los toltecas y tlaxcaltecas. Tras saquear Cholula, llegó a la capital azteca, Tenochtitlán, en donde fue recibido pacíficamente por el emperador Moctezuma, que se declaró vasallo del rey de Castilla. La posible identificación de los españoles con seres divinos y de Cortés con el anunciado regreso del dios Quetzalcoátl favoreció quizá esta acogida a unos extranjeros que enseguida se empezaron a comportarse como invasores ambiciosos y violentos.
Entonces tuvo que dejar la ciudad a su lugarteniente Alvarado, para hacer frente a las tropas de Pánfilo de Narváez, enviadas por el gobernador Velázquez para castigar su rebeldía y devolverle a Cuba; Cortés los derrotó en Cempoala y consiguió que se uniese a él la mayor parte del contingente (1520). Cuando regresó a Tenochtitlán, encontró una gran agitación indígena contra los españoles a causa de los ataques realizados a sus creencias y símbolos religiosos y de la matanza de sus nobles por Alvarado para desbaratar una supuesta conspiración. Hizo prisionero a Moctezuma e intentó que éste mediara para calmar a su pueblo, sin lograr otra cosa que la muerte del emperador.
Finalmente, Cortés se vio obligado a abandonar Tenochtitlán en la llamada «Noche Triste» (30 de junio de 1520), en la que su pequeño ejército resultó diezmado. Refugiado en Tlaxcala, siguió luchando contra los aztecas -ahora bajo el mando de Cuauhtémoc-, a los que derrotó en la batalla de Otumba; y, finalmente, cercó y tomó Tenochtitlán (1521). Destruida la capital azteca, reconstruyó en el mismo lugar (una isla en el centro de un lago) la ciudad española de México. Dominado el antiguo imperio azteca, lanzó expediciones hacia el sur para anexionar los territorios de Yucatán, Honduras y Guatemala.
Los detalles de la conquista de México, así como los argumentos que justificaban las decisiones de Hernán Cortés fueron expuestos en las cuatro Cartas de relación que envió al rey. En 1522 fue nombrado gobernador y capitán general de Nueva España (nombre que dieron los conquistadores al territorio mexicano). Sin embargo, la Corona española -ya en manos de Carlos I- practicó una política de recorte de los poderes de los conquistadores, para controlar más directamente las Indias; funcionarios reales aparecieron en México enviados para compartir la autoridad de Cortés hasta que, en 1528, éste fue destituido y enviado a la Península.
En España salió absuelto de todas las acusaciones e incluso fue nombrado marqués del Valle de Oaxaca, además de conservar el cargo honorífico de capitán general, aunque sin funciones gubernativas. De vuelta a México en 1530, todavía organizó algunas expediciones de conquista, como las que incorporaron a México la Baja California (1533 y 1539).
Regresó nuevamente a España para intentar obtener mercedes de la Corona por los servicios prestados, para lo cual llegó a participar en una expedición contra Argel en 1540; pero sus reclamaciones nunca obtuvieron plena satisfacción. Se instaló en un pueblo cercano a Sevilla, en donde reunió una tertulia literaria y humanística. El conquistador de México, impulsado por un gran fervor religioso -aparte de la ambición de honores y riquezas común a todos los conquistadores-, fue un hombre culto y con preocupaciones morales inusuales en su entorno (como la de plantearse si era legítimo esclavizar a los indios).