La teoría más aceptada sobre el origen y desarrollo de la humanidad dice que el hombre nació en África, y que fue migrando hacia todas partes del mundo. Los primeros humanos llegaron a América cruzando el estrecho de Bering hace aproximadamente 40 mil años y fue a partir de allí que se extendieron por todo el continente.
Sin embargo, según la teoría del origen autóctono, creada en la década de 1880, se afirmaba que toda la humanidad había surgido en América del Sur. Si bien la teoría estaba sostenida por pruebas –herramientas de piedra, huesos y pruebas de incendios hechos por el hombre de hace 3,5 millones de años–, no agradó mucho a la comunidad científica.
Durante diez años, Ameghino se dedicó a buscar restos fósiles en una zona de Argentina, llamada Llanura Pampeana. Tuvo bastante éxito en el exterior –en su país la teoría no causó emoción–, por lo que Ameghino exhibió en 1878 en Paris una colección arqueológica y paleológica muy importante.
Con más confianza, en 1880 escribirá un libro titulado “La antiguedad del hombre en La Plata”. Sus siguientes descubrimientos arqueológicos fueron publicados en escritos muy controversiales, aunque muy bien explicados, de su teoría. El mundo de la ciencia describió a sus descubrimientos como apresurados, y en general estaban muy mal considerados.
La teoría más aceptada sobre el origen y desarrollo de la humanidad dice que el hombre nació en África, y que fue migrando hacia todas partes del mundo. Los primeros humanos llegaron a América cruzando el estrecho de Bering hace aproximadamente 40 mil años y fue a partir de allí que se extendieron por todo el continente.
Sin embargo, según la teoría del origen autóctono, creada en la década de 1880, se afirmaba que toda la humanidad había surgido en América del Sur. Si bien la teoría estaba sostenida por pruebas –herramientas de piedra, huesos y pruebas de incendios hechos por el hombre de hace 3,5 millones de años–, no agradó mucho a la comunidad científica.
Durante diez años, Ameghino se dedicó a buscar restos fósiles en una zona de Argentina, llamada Llanura Pampeana. Tuvo bastante éxito en el exterior –en su país la teoría no causó emoción–, por lo que Ameghino exhibió en 1878 en Paris una colección arqueológica y paleológica muy importante.
Con más confianza, en 1880 escribirá un libro titulado “La antiguedad del hombre en La Plata”.
Sus siguientes descubrimientos arqueológicos fueron publicados en escritos muy controversiales, aunque muy bien explicados, de su teoría. El mundo de la ciencia describió a sus descubrimientos como apresurados, y en general estaban muy mal considerados.