Muchas personas no presentan síntomas hasta las etapas más avanzadas y la única posibilidad de diagnosticar la enfermedad es mediante un análisis de sangre de rutina. Cuando los síntomas aparecen, incluyen sangrado fácil, sensación de agotamiento o cansancio, pérdida de peso, palidez y sudores nocturnos.
Puede no presentar síntomas, pero las personas pueden sufrir:
Todo el cuerpo: fatiga, anemia, malestar o sudores nocturnos
También comunes: capacidad reducida para hacer ejercicio, dificultad para respirar, hematomas, palidez, pérdida de peso o sangrado
Respuesta:
Requiere diagnóstico médico
Muchas personas no presentan síntomas hasta las etapas más avanzadas y la única posibilidad de diagnosticar la enfermedad es mediante un análisis de sangre de rutina. Cuando los síntomas aparecen, incluyen sangrado fácil, sensación de agotamiento o cansancio, pérdida de peso, palidez y sudores nocturnos.
Puede no presentar síntomas, pero las personas pueden sufrir:
Todo el cuerpo: fatiga, anemia, malestar o sudores nocturnos
También comunes: capacidad reducida para hacer ejercicio, dificultad para respirar, hematomas, palidez, pérdida de peso o sangrado