El gas lacrimógeno y el espray de pimienta, que la policía ha utilizado para dispersar a las multitudes, hacen que las personas lloren y tosan, y aumentan las secreciones respiratorias de los ojos, nariz y boca. Además hay más riesgo de contagio del virus, así como más posibilidades de sufrir violencia, etc.
Respuesta:
Explicación:
El gas lacrimógeno y el espray de pimienta, que la policía ha utilizado para dispersar a las multitudes, hacen que las personas lloren y tosan, y aumentan las secreciones respiratorias de los ojos, nariz y boca. Además hay más riesgo de contagio del virus, así como más posibilidades de sufrir violencia, etc.