johan01lopezEn el último tercio del siglo V estalló un terrible conflicto entre las dos ciudades más poderosas de Grecia: Esparta y Atenas. Diversos motivos los movieron, y de él resultó una efímera hegemonía de Esparta sobre el mundo griego, durante cuyo tiempo predominaron las oligarquías en todos los estados sometidos a su autoridad. Pero ese tiempo fue muy breve y Esparta descendió de su pedestal porque careció de capacidad política para afirmar los resultados de su conquista militar.