El guanaco protegía su estrella caminando delante de ella, y luchaba ferviente contra la fuerza del mal, pero esta se escondía tras las piedras y desaparecía tomando su color. El espíritu maligno siguió persiguiendo a Wanglen, pero la estrella insistía en que amaba al guanaco y que con él poblaría la Tierra
Respuesta:
El guanaco protegía su estrella caminando delante de ella, y luchaba ferviente contra la fuerza del mal, pero esta se escondía tras las piedras y desaparecía tomando su color. El espíritu maligno siguió persiguiendo a Wanglen, pero la estrella insistía en que amaba al guanaco y que con él poblaría la Tierra
espero ayudar dame coronita porfis