MarilupLa protagonista es Brígida, la menor de seis hermanas y que quizá por ser la menor, su padre la había dejado en completa libertad, no importándole que no hubiera terminado sus clases de música - ella decía que nunca aprendió la llave de Fa - y que no continuara sus estudios formales. Desde muy niña y como todos los jóvenes la evitaban y no la invitaban a sus juegos porque la consideraban tonta e ignorante, casada con Luís, un hombre ya maduro y amigo de su padre. La jovialidad, dinamismo y espontaneidad de sus dieciocho años choca con la seriedad del marido, siempre grave y concentrado en su trabajo. Los desentendimientos tienen como escenario en la narración el dormitorio conyugal, a través de cuyas ventanas se divisa un gran árbol del jardín, un gomero y la imaginación de Brígida, encuentra en el árbol consuelo, en sus momentos de soledad se retira al cuarto de vestir en cuya ventana se encuentra el gomero, para apaciblemente escuchar el sonido de la lluvia, sus ramas le impiden ver la realidad exterior, como si la acogieran y abrazaran protectoramente, dándole con la atenuación de la luz exterior, la intimidad necesaria en el describe su soledad, falta de comunicación y dependencia de Luis, su esposo, un hombre mucho mayor que ejerce su posición patriarcal y no satisface el deseo de ser madre de Brígida, ni tampoco cumple las promesas que le ha hecho, como un viaje a Europa. El momento cumbre de la obra lo representa el corte del árbol, la protagonista queda desprovista, en un cuarto lleno de luz, que le muestra una calle que queda visible dejando al descubierto su fealdad y sordidez y sus ruidos, un edificio, niños jugando, una calle estrecha, un marido de rostro ajado por el paso de los años, ella desnuda frente a la luz y junto a ese hombre que no le había dado hijos. Reconoce entonces, que es mentira su resignación ella quiere viajes, amor, locuras y su última frase a su marido es ¡el árbol, Luis, el árbol!
No hay de que :3