Jenny le prohibió subir al ático por diferentes razones, que estaba sucio. Desordenado o habían ratas, Ian no tenia mucha curiosidad. Aquel domingo lluvioso cuando su amigo Fredy tuvo que ir a un paseo y su tía tenía invitados, le entro la curiosidad de subir al ático. La casa era antigua Victoriana. Jenny era la única pariente de Ian la hermana soltera desu madre de 50 años, era de aspecto duro y dominante pero era dulce y amorosa en su interior, trabajaba de secretaria, cuidaba a Ian y hacia obras de caridad a los ancianos. El padre lo había abandonado, su madres y hermana mayor habían muerto en un accidente, poco hablaba de esto su tía. Recordaba que jugaba en su corralito rodeado de muñecas ajadas y rotas, eran muy pobres y ella tenia un“HOSPITAL DE MUÑECAS” las reparaba para tener algún dinero. Subió al ático por una escalera aprobando todas las llaves, el ático estaba todo desordenado, pero no habían ratas lo desoluciono un poco, continuando con su inspección encontró en un rincón una pila de muñecas estropeadas y rotas, le llamo la atención una que estaba sentada en una silla, la limpio y vio con espanto que solo tenia un ojo, elotro una oscura cuenca, las mejilla manchadas y peladas, la nariz quebrad una oreja colgaba y un hueco en una de sus mejilla. Lo peor eran sus labios parecía una sonrisa QUEBRADA Y RETORCIDA. Ian se sintió mal, la habitación giraba y sintió un chirrido de frenos, abrió los ojos estaba tendido junto a la muñeca de la sonrisa quebrada y grito de terror cunado sintió que una risita salía de la muñeca,salio corriendo bajo la escala.
A.MASTERS
Jenny le prohibió subir al ático por diferentes razones, que estaba sucio. Desordenado o habían ratas, Ian no tenia mucha curiosidad. Aquel domingo lluvioso cuando su amigo Fredy tuvo que ir a un paseo y su tía tenía invitados, le entro la curiosidad de subir al ático.
La casa era antigua Victoriana. Jenny era la única pariente de Ian la hermana soltera desu madre de 50 años, era de aspecto duro y dominante pero era dulce y amorosa en su interior, trabajaba de secretaria, cuidaba a Ian y hacia obras de caridad a los ancianos. El padre lo había abandonado, su madres y hermana mayor habían muerto en un accidente, poco hablaba de esto su tía. Recordaba que jugaba en su corralito rodeado de muñecas ajadas y rotas, eran muy pobres y ella tenia un“HOSPITAL DE MUÑECAS” las reparaba para tener algún dinero. Subió al ático por una escalera aprobando todas las llaves, el ático estaba todo desordenado, pero no habían ratas lo desoluciono un poco, continuando con su inspección encontró en un rincón una pila de muñecas estropeadas y rotas, le llamo la atención una que estaba sentada en una silla, la limpio y vio con espanto que solo tenia un ojo, elotro una oscura cuenca, las mejilla manchadas y peladas, la nariz quebrad una oreja colgaba y un hueco en una de sus mejilla. Lo peor eran sus labios parecía una sonrisa QUEBRADA Y RETORCIDA. Ian se sintió mal, la habitación giraba y sintió un chirrido de frenos, abrió los ojos estaba tendido junto a la muñeca de la sonrisa quebrada y grito de terror cunado sintió que una risita salía de la muñeca,salio corriendo bajo la escala.