A. Elías ora por sequía y experimenta la provisión de Dios.
1. (1 Reyes 17:1) Elías habla sobre el juicio de Jehová.
Entonces Elías tisbita, que era de los moradores de Galaad, dijo a Acab: Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra.
a. Elías tisbita: En ese momento crucial en la historia de Judá e Israel, el Profeta Elías apareció repentinamente. Él se convirtió en la fuerza espiritual dominante en Israel durante estos días oscuros de la apostasía de Acab.
i. El nombre Elías significa, Yahveh es mi Dios. En los días cuando el gobierno de Acab oficialmente apoyaba la adoración a Baal y otros dioses, aún el nombre de este profeta le decía la verdad.
ii. Era un tiempo crucial en la historia de Israel. Parecía como si la adoración del verdadero Dios podría ser completamente eliminada en el reino del norte. “La tierra estaba llena de sacerdotes de Baal y de las arboledas – orgullosos del favor de la Corte; glorificándose en su repentina llegada al poder; insolentes, avaros, escandalosos, y envilecidos. Los fuegos de persecución fueron encendidas, y comenzaban a arder con furia.” (Meyer)
iii. “Toda la tierra parecía estar en apostasía. De todos los miles de Israel, solamente siete mil quedaban los cuales no habían doblado sus rodillas o habían besado la mano de Baal. Pero estaban paralizados con temor; y se mantuvieron inmóviles, que su misma existencia no era conocida para Elías en la hora de gran soledad.” (Meyer)
b. Que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra: Esta fue una demostración dramática en contra del dios pagano Baal, quien se pensaba que era el dios del cielo, el dios del clima. Elías mostró que por medio de sus oraciones hacia el Dios de Israel, Yahveh era más poderoso que Baal.
i. “La antigua religión en contra de la nueva; el hijo de naturaleza en contra del hijo afeminado de las cortes; pelo de camello en contra de ropa suave; fuerza moral en contra de debilidad moral.” (Meyer)
ii. Elías no solamente era el profeta de esta sequía – en el sentido de la oración, él fue la causa de la sequía. Él oró y sucedió. Santiago 5:17-18 pone esto en claro: Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto.
c. Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy: Esta declaración de Elías nos da un entendimiento de la fuente de su fuerza. Se dijo específicamente que Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras (Santiago 5:17). Pero él mostró una fuerza más grande que la mayoría de nosotros en nuestra vida con Dios. Debemos de prestar atención a estos indicadores de la fuerza de Elías.
i. Vive Jehová Dios de Israel: Todos los demás sentían que Jehová estaba muerto, pero para Elías Jehová vivía. Él era la realidad suprema de la vida de Elías.
ii. En cuya presencia estoy: Él estaba en la presencia de Acab, pero él estaba consciente de la presencia de alguien más grande que un rey terrenal. Gabriel mismo no pudo escoger un título mayor (Lucas 1:19).
2. (1 Reyes 17:2-5) Elías huye a Querit.
Y vino a él palabra de Jehová, diciendo: Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el arroyo de Querit, que está frente al Jordán. Beberás del arroyo; y yo he mandado a los cuervos que te den allí de comer. Y él fue e hizo conforme a la palabra de Jehová; pues se fue y vivió junto al arroyo de Querit, que está frente al Jordán.
Respuesta:
A. Elías ora por sequía y experimenta la provisión de Dios.
1. (1 Reyes 17:1) Elías habla sobre el juicio de Jehová.
Entonces Elías tisbita, que era de los moradores de Galaad, dijo a Acab: Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra.
a. Elías tisbita: En ese momento crucial en la historia de Judá e Israel, el Profeta Elías apareció repentinamente. Él se convirtió en la fuerza espiritual dominante en Israel durante estos días oscuros de la apostasía de Acab.
i. El nombre Elías significa, Yahveh es mi Dios. En los días cuando el gobierno de Acab oficialmente apoyaba la adoración a Baal y otros dioses, aún el nombre de este profeta le decía la verdad.
ii. Era un tiempo crucial en la historia de Israel. Parecía como si la adoración del verdadero Dios podría ser completamente eliminada en el reino del norte. “La tierra estaba llena de sacerdotes de Baal y de las arboledas – orgullosos del favor de la Corte; glorificándose en su repentina llegada al poder; insolentes, avaros, escandalosos, y envilecidos. Los fuegos de persecución fueron encendidas, y comenzaban a arder con furia.” (Meyer)
iii. “Toda la tierra parecía estar en apostasía. De todos los miles de Israel, solamente siete mil quedaban los cuales no habían doblado sus rodillas o habían besado la mano de Baal. Pero estaban paralizados con temor; y se mantuvieron inmóviles, que su misma existencia no era conocida para Elías en la hora de gran soledad.” (Meyer)
b. Que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra: Esta fue una demostración dramática en contra del dios pagano Baal, quien se pensaba que era el dios del cielo, el dios del clima. Elías mostró que por medio de sus oraciones hacia el Dios de Israel, Yahveh era más poderoso que Baal.
i. “La antigua religión en contra de la nueva; el hijo de naturaleza en contra del hijo afeminado de las cortes; pelo de camello en contra de ropa suave; fuerza moral en contra de debilidad moral.” (Meyer)
ii. Elías no solamente era el profeta de esta sequía – en el sentido de la oración, él fue la causa de la sequía. Él oró y sucedió. Santiago 5:17-18 pone esto en claro: Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto.
c. Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy: Esta declaración de Elías nos da un entendimiento de la fuente de su fuerza. Se dijo específicamente que Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras (Santiago 5:17). Pero él mostró una fuerza más grande que la mayoría de nosotros en nuestra vida con Dios. Debemos de prestar atención a estos indicadores de la fuerza de Elías.
i. Vive Jehová Dios de Israel: Todos los demás sentían que Jehová estaba muerto, pero para Elías Jehová vivía. Él era la realidad suprema de la vida de Elías.
ii. En cuya presencia estoy: Él estaba en la presencia de Acab, pero él estaba consciente de la presencia de alguien más grande que un rey terrenal. Gabriel mismo no pudo escoger un título mayor (Lucas 1:19).
2. (1 Reyes 17:2-5) Elías huye a Querit.
Y vino a él palabra de Jehová, diciendo: Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el arroyo de Querit, que está frente al Jordán. Beberás del arroyo; y yo he mandado a los cuervos que te den allí de comer. Y él fue e hizo conforme a la palabra de Jehová; pues se fue y vivió junto al arroyo de Querit, que está frente al Jordán.
Explicación: