nicole2612
Este es un resumen un poco largo, espero que te ayude: Relata la historia de Zezé, un niño mestizo pobre en Brasil y que un día, de pronto, descubre el dolor y se hace adulto tempranamente. Zezé, el protagonista, se muda con su familia a una nueva casa y cada hermano escoge un árbol del jardín, salvo Zezé, que no puede hacer otra cosa sino resignarse a recibir la que nadie quiere, una planta de naranja –lima con la que acaba encariñándose porque en su intensa imaginación es la única planta del mundo que puede hablar.
A partir de ahí se relatan una serie de travesuras y errores que el niño realiza, no por maldad, sino justamente por su gran inocencia.
El padre reacciona casi impulsado por la cólera que le provoca el estar sin empleo y sentirse un inútil, un estorbo. A la dureza de la vida llena de maltratos, Zezé opone una activa fantasía: su planta de naranja-limase convierte en su confidente, su mejor amigo y compañero de juegos.
Gracias a su imaginación, Minguito o Xururuca –que son los nombres que cariñosamente el protagonista otorga a la planta– se convierte en el medio de escape de su dura realidad.
Un giro importante en la vida de Zezé es su encuentro con el dueño del mejor coche de la ciudad, el Portuga. De él se hará muy amigo, y el Portuga se verá profundamente enternecido por la forma de ser de este niño. Su amistad crecerá día a día, tronándose en cariño, en amor verdadero, en amor de un padre a un hijo.
Incluso después de una terrible golpiza, el Portuga conversa con Zezé acerca de la posibilidad de adoptarlo, lo que genera en este toda una corriente de ilusiones.
Llega el momento en que la familia de Zezé piensa en cortar su planta de naranja-lima, que cada vez es mas grande de tamaño, pero mas pequeña en su corazón, pues crece en él cada vez más el amor por Portuga; al día siguiente, en clase, Zezé se entera de qué el mangaratiba, el tren de la ciudad, acaba de arrollar a Portuga.
A raíz de esto enferma casi de muerte por un periodo de unas tres semanas, después de las cuales se recupera para vivir lleno de tristeza la nueva situación económica de su casa: su padre a sido empleado en una nueva empresa de la ciudad con un buen cargo, por lo que el tiempo de pobreza parece haber llegado a su fin.
La obra acaba con una carta de Zezé a Manuel Valladares, confesando todos los sentimientos que a tenido a lo largo de su vida, y cómo tuvo que crecer precozmente.
Relata la historia de Zezé, un niño mestizo pobre en Brasil y que un día, de pronto, descubre el dolor y se hace adulto tempranamente.
Zezé, el protagonista, se muda con su familia a una nueva casa y cada hermano escoge un árbol del jardín, salvo Zezé, que no puede hacer otra cosa sino resignarse a recibir la que nadie quiere, una planta de naranja –lima con la que acaba encariñándose porque en su intensa imaginación es la única planta del mundo que puede hablar.
A partir de ahí se relatan una serie de travesuras y errores que el niño realiza, no por maldad, sino justamente por su gran inocencia.
El padre reacciona casi impulsado por la cólera que le provoca el estar sin empleo y sentirse un inútil, un estorbo. A la dureza de la vida llena de maltratos, Zezé opone una activa fantasía: su planta de naranja-limase convierte en su confidente, su mejor amigo y compañero de juegos.
Gracias a su imaginación, Minguito o Xururuca –que son los nombres que cariñosamente el protagonista otorga a la planta– se convierte en el medio de escape de su dura realidad.
Un giro importante en la vida de Zezé es su encuentro con el dueño del mejor coche de la ciudad, el Portuga. De él se hará muy amigo, y el Portuga se verá profundamente enternecido por la forma de ser de este niño.
Su amistad crecerá día a día, tronándose en cariño, en amor verdadero, en amor de un padre a un hijo.
Incluso después de una terrible golpiza, el Portuga conversa con Zezé acerca de la posibilidad de adoptarlo, lo que genera en este toda una corriente de ilusiones.
Llega el momento en que la familia de Zezé piensa en cortar su planta de naranja-lima, que cada vez es mas grande de tamaño, pero mas pequeña en su corazón, pues crece en él cada vez más el amor por Portuga; al día siguiente, en clase, Zezé se entera de qué el mangaratiba, el tren de la ciudad, acaba de arrollar a Portuga.
A raíz de esto enferma casi de muerte por un periodo de unas tres semanas, después de las cuales se recupera para vivir lleno de tristeza la nueva situación económica de su casa: su padre a sido empleado en una nueva empresa de la ciudad con un buen cargo, por lo que el tiempo de pobreza parece haber llegado a su fin.
La obra acaba con una carta de Zezé a Manuel Valladares, confesando todos los sentimientos que a tenido a lo largo de su vida, y cómo tuvo que crecer precozmente.