jimenaarrieta20
Este combate se llevó a cabo el 2 de mayo de 1866 en nuestro puerto del Callao, que bombardeado por una poderosa escuadra española comandada por el almirante Casto Méndez Núñez. La defensa peruana estuvo al mando del presidente Mariano Ignacio Prado. Ocurrió en el contexto de la Guerra Hispano-Sudamericana (1865-1866).
La escuadra española estuvo conformada por las fragatas “Numancia”, “Blanca”, “Resolución”, “Berenguela”, “Villa de Madrid”, “Almansa” y la corbeta “Vencedora”. Los defensores peruanos instalaron sus cañones en baterías como “Abtao”, “Maipú”, “Chacabuco”, “Independencia”, el fuerte “Santa Rosa” y el torreón de “La Merced”.
Los hispanos bombardearon el puerto entre las 11.50 a.m. y las 5 p.m. logrando destruir varias baterías y matar a cientos de defensores. Entre estos se cuenta al Ministro de Guerra José Gálvez Egúsquiza. Los peruanos respondieron el fuego causando grandes averías en los buques “Numancia”, “Villa de Madrid”, “Berenguela” y “Almansa”. Murieron 43 españoles y 83 quedaron heridos, uno de estos fue el almirante Méndez Núñez.
A las 5 de la tarde, los españoles detuvieron su cañoneo y se retiraron con varios buques inutilizados. Ocho días después enrumbaron hacia su patria para nunca más regresar.
La escuadra española estuvo conformada por las fragatas “Numancia”, “Blanca”, “Resolución”, “Berenguela”, “Villa de Madrid”, “Almansa” y la corbeta “Vencedora”. Los defensores peruanos instalaron sus cañones en baterías como “Abtao”, “Maipú”, “Chacabuco”, “Independencia”, el fuerte “Santa Rosa” y el torreón de “La Merced”.
Los hispanos bombardearon el puerto entre las 11.50 a.m. y las 5 p.m. logrando destruir varias baterías y matar a cientos de defensores. Entre estos se cuenta al Ministro de Guerra José Gálvez Egúsquiza. Los peruanos respondieron el fuego causando grandes averías en los buques “Numancia”, “Villa de Madrid”, “Berenguela” y “Almansa”. Murieron 43 españoles y 83 quedaron heridos, uno de estos fue el almirante Méndez Núñez.
A las 5 de la tarde, los españoles detuvieron su cañoneo y se retiraron con varios buques inutilizados. Ocho días después enrumbaron hacia su patria para nunca más regresar.