Ana1819y
Hablar de historia local y de identidad nacional es hablar sobre nosotros y de nuestra historia. La micro historia se preocupa de las personas y agrupaciones que viven en un mismo territorio. La historia local nace de una corriente historiográfica que adquirió fuerza en la década de los 70, con el desarrollo de las mentalidades en Francia, de la historia social marxista surge Inglaterra, de la microhistoria en Italia y la antropología histórica en los Estados Unidos. La historia local aparece entonces como una forma de rescatar a los sujetos históricos comunes que habían sido excluidos de la historia oficial, salvándolos del olvido, gracias a los procesos individuales y sociales del quehacer cotidiano de la comunidad.
Durante muchos años nos hemos preguntado de dónde proviene el nombre de la parroquia a la cual pertenecemos, donde nacimos, crecimos y actualmente vivimos con nuestros hijos. Para algunos investigadores puede ser significativo conocer la historia de algunas comunidades, pero más aún para quienes compartimos y deseamos que no se pierda la génesis de la parroquia. Para dar inicio a esta larga lucha por el discernimiento de la historia de la parroquia Antímano, comenzaremos por indagar de dónde proviene la palabra Antímano.
Según Muerza (1990), en un folleto titulado” Historia de Antímano para sus habitantes” edición patrocinada por la empresa SIDETUR. Entre otras conjetura mencionadas en el folleto y la que mantiene mayor coherencia, es la que Don Arístides rojas proporciona: La palabra Antímano es un acrónimo (vocablo formado al unir parte de dos palabras) derivado de los términos ATAMANONA y AMATIMA, que eran los nombres de dos indígenas proveniente de las costa orientales, que habitaban la localidad de Antímano en la época precolombina.
Antonio Reyes en su libro caciques aborígenes de Venezuela citado en, Donís (1988), formula que “y así mismo se puede destacar, cómo infinitas aldeas y poblaciones del presente rememoran los nombres de caciques decididos y valerosos: Antímano, Baruta, Caruao, Higuerote” (p )
Según Donís (1988), expone que: “El pueblo fue fundado en 1621, probablemente para el mes de abril. En efecto, la notificación a los encomenderos de los indios que conformarían el poblado se hizo el 8 de mayo de 1621.” (p ) . Luego del acto jurídico, se les hace entrega a los encomenderos de los ornamentos para que construyeran la iglesia, la casa del cura doctrinero y el cementerio.
La designación de Antímano se establece en 1621 como un poblado consolidado dedicado a la agricultura, y como pueblo de doctrina con el nombre de San Pedro y San Pablo, inicialmente se estableció en Macarao y posteriormente fue trasladado al valle de Antímano. Donís (2001).
Además afirma Donís que “los pueblos de doctrina surgieron como la primera forma de evangelización ”. Y que para la época los conquistadores tomaba las tierras y sometían a su habitantes, colocándolos al dominio de la Corona Española, la cual emitía una real cédula (autorización) encomendando a una persona para su cuidado de por vida y la de sus herederos Muerza (1990).
Por esta razón, se establece el 8 de mayo como día de celebración de la parroquia Antímano. Además se puede determinar que para la época esa fecha constituyo un acto jurídico de la notificación a los encomenderos, ya que no existe acta fundacional de la del poblado por ser una parroquia foránea.
Muerza, (1990). Se refiere con relación a la procedencia de los primeros pobladores existen dos explicaciones que han sido manifestadas por diferente historiadores: La primera es que las revieras del rió Guaire eran habitadas por los indios Toromaymas y la segunda es que Don Francisco Fajardo en sus travesías, fueron traídos los Guayqueries provenientes de la isla de Margarita para los años de 1607.
Para la época de las guerras de independencia, la mano de obra esclava en Antímano, registró una declinación en sólo ocho años, quizás la gran mayoría de estos esclavos, se incorporaron en las filas de las tropas en disputas en especial la del ejercito realista. Para 1811, se supone que la gran mayoría de los habitantes de Antímano estaba compuesta por indígenas y esclavos que se encontraba distribuidos a lo largo de las haciendas adyacentes, de producción de caña de azúcar, como por ejemplo la de la hacienda de Montalbán.
La historia local aparece entonces como una forma de rescatar a los sujetos históricos comunes que habían sido excluidos de la historia oficial, salvándolos del olvido, gracias a los procesos individuales y sociales del quehacer cotidiano de la comunidad.
Durante muchos años nos hemos preguntado de dónde proviene el nombre de la parroquia a la cual pertenecemos, donde nacimos, crecimos y actualmente vivimos con nuestros hijos. Para algunos investigadores puede ser significativo conocer la historia de algunas comunidades, pero más aún para quienes compartimos y deseamos que no se pierda la génesis de la parroquia.
Para dar inicio a esta larga lucha por el discernimiento de la historia de la parroquia Antímano, comenzaremos por indagar de dónde proviene la palabra Antímano.
Según Muerza (1990), en un folleto titulado” Historia de Antímano para sus habitantes” edición patrocinada por la empresa SIDETUR. Entre otras conjetura mencionadas en el folleto y la que mantiene mayor coherencia, es la que Don Arístides rojas proporciona: La palabra Antímano es un acrónimo (vocablo formado al unir parte de dos palabras) derivado de los términos ATAMANONA y AMATIMA, que eran los nombres de dos indígenas proveniente de las costa orientales, que habitaban la localidad de Antímano en la época precolombina.
Antonio Reyes en su libro caciques aborígenes de Venezuela citado en, Donís (1988), formula que “y así mismo se puede destacar, cómo infinitas aldeas y poblaciones del presente rememoran los nombres de caciques decididos y valerosos: Antímano, Baruta, Caruao, Higuerote” (p )
Según Donís (1988), expone que: “El pueblo fue fundado en 1621, probablemente para el mes de abril. En efecto, la notificación a los encomenderos de los indios que conformarían el poblado se hizo el 8 de mayo de 1621.” (p ) . Luego del acto jurídico, se les hace entrega a los encomenderos de los ornamentos para que construyeran la iglesia, la casa del cura doctrinero y el cementerio.
La designación de Antímano se establece en 1621 como un poblado consolidado dedicado a la agricultura, y como pueblo de doctrina con el nombre de San Pedro y San Pablo, inicialmente se estableció en Macarao y posteriormente fue trasladado al valle de Antímano. Donís (2001).
Además afirma Donís que “los pueblos de doctrina surgieron como la primera forma de evangelización ”. Y que para la época los conquistadores tomaba las tierras y sometían a su habitantes, colocándolos al dominio de la Corona Española, la cual emitía una real cédula (autorización) encomendando a una persona para su cuidado de por vida y la de sus herederos Muerza (1990).
Por esta razón, se establece el 8 de mayo como día de celebración de la parroquia Antímano. Además se puede determinar que para la época esa fecha constituyo un acto jurídico de la notificación a los encomenderos, ya que no existe acta fundacional de la del poblado por ser una parroquia foránea.
Muerza, (1990). Se refiere con relación a la procedencia de los primeros pobladores existen dos explicaciones que han sido manifestadas por diferente historiadores: La primera es que las revieras del rió Guaire eran habitadas por los indios Toromaymas y la segunda es que Don Francisco Fajardo en sus travesías, fueron traídos los Guayqueries provenientes de la isla de Margarita para los años de 1607.
Para la época de las guerras de independencia, la mano de obra esclava en Antímano, registró una declinación en sólo ocho años, quizás la gran mayoría de estos esclavos, se incorporaron en las filas de las tropas en disputas en especial la del ejercito realista. Para 1811, se supone que la gran mayoría de los habitantes de Antímano estaba compuesta por indígenas y esclavos que se encontraba distribuidos a lo largo de las haciendas adyacentes, de producción de caña de azúcar, como por ejemplo la de la hacienda de Montalbán.