Los científicos estadounidenses auguraron una drástica reducción de la población activa en el mundo para el año 2100 y el aumento de personas de tercera edad, según un artículo publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.
Las temperaturas en la Tierra suelen oscilar entre 115 grados Fahrenheit en el punto más caluroso hasta menos 100 grados en el punto más frío. La temperatura promedio aproximada de la Tierra es de 61 grados. La temperatura del aire más alta jamás registrada en la Tierra fue de 134 grados, que se registró en 1913 en Death Valley, California.
QUÉ ES EL EFECTO INVERNADERO. El efecto invernadero es un fenómeno natural y beneficioso para nosotros. Determinados gases presentes en la atmósfera retienen parte de la radiación térmica emitida por la superficie terrestre tras ser calentada por el sol, manteniendo la temperatura del planeta a un nivel adecuado para el desarrollo de la vida.
Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, como el CO2 y el CH4. Usar energías renovables en vez de combustibles fósiles, sus derivados, gas y carbón. Usar más el transporte público y otros medios de transporte no contaminantes, como la bicicleta u otros vehículos ecológicos.
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Los científicos estadounidenses auguraron una drástica reducción de la población activa en el mundo para el año 2100 y el aumento de personas de tercera edad, según un artículo publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.
Las temperaturas en la Tierra suelen oscilar entre 115 grados Fahrenheit en el punto más caluroso hasta menos 100 grados en el punto más frío. La temperatura promedio aproximada de la Tierra es de 61 grados. La temperatura del aire más alta jamás registrada en la Tierra fue de 134 grados, que se registró en 1913 en Death Valley, California.
QUÉ ES EL EFECTO INVERNADERO. El efecto invernadero es un fenómeno natural y beneficioso para nosotros. Determinados gases presentes en la atmósfera retienen parte de la radiación térmica emitida por la superficie terrestre tras ser calentada por el sol, manteniendo la temperatura del planeta a un nivel adecuado para el desarrollo de la vida.
Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, como el CO2 y el CH4. Usar energías renovables en vez de combustibles fósiles, sus derivados, gas y carbón. Usar más el transporte público y otros medios de transporte no contaminantes, como la bicicleta u otros vehículos ecológicos.