A ti me acojo, Señor, al comenzar el día, protégeme. En ti pongo mi confianza como un niño en su madre, ayúdame. A ti abro mis proyectos y los planes de este día, acompáñame A ti ofrezco lo que soy y lo que tengo, acógelo. A ti que eres Dios de la vida, te pido fuerza, anímame. Mi corazón te ama y, lleno de gozo exulta en ti.
Respuesta:
el señor es nuestro patrón de corazones y nos ama como somos