El bullying o acoso escolar no hace distinciones sociales o de sexo. A pesar de la creencia extendida de que los centros escolares situados en zonas menos favorecidas son, por definición, más conflictivos, lo cierto es que el bullying está presente en casi cualquier contexto social.
Respecto al sexo, tampoco se aprecian diferencias, al menos en lo que respecta a las víctimas. En cambio, en el perfil del agresor sí se aprecia predominancia de los varones.
El bullying o acoso escolar no hace distinciones sociales o de sexo. A pesar de la creencia extendida de que los centros escolares situados en zonas menos favorecidas son, por definición, más conflictivos, lo cierto es que el bullying está presente en casi cualquier contexto social.
Respecto al sexo, tampoco se aprecian diferencias, al menos en lo que respecta a las víctimas. En cambio, en el perfil del agresor sí se aprecia predominancia de los varones.