Don Eulogio es un anciano hosco y extravagante, que vive en una casa enorme con su hijo, su hija política y su nieto. Al parecer se siente ignorado y maltratado por su familia, por lo que decide tomar venganza. Aparece en el huerto de la casa, de noche, aguardando inquietamente la presencia de su nieto, con la intención de asustarlo. Para tal fin había comprado una vela y desenterrado una calavera humana, a la que en toda la tarde había limpiado cuidadosamente con aceite. Cuando considera llegado el momento, se coloca en medio del sendero que va de la cocina al jardín, y arma allí un pequeño montículo con piedras donde asienta la vela, a la que cubre luego con la calavera, notando con alegría que la medida era exacta, pues el punto blanco de vela se asomaba por el orificio del cráneo. Cuando ve por fin acercarse al niño, prende la vela y al instante se enciende toda la calavera, produciéndose así una visión sobrecogedora. El niño, al verla, da un grito de terror, y salen los padres a ver lo que ocurre, mientras que el abuelo se escabulle evitando ser visto. Cuando por fin sale hacia la calle, el viejo se siente satisfecho de su venganza.
Respuesta:
Don Eulogio es un anciano hosco y extravagante, que vive en una casa enorme con su hijo, su hija política y su nieto. Al parecer se siente ignorado y maltratado por su familia, por lo que decide tomar venganza. Aparece en el huerto de la casa, de noche, aguardando inquietamente la presencia de su nieto, con la intención de asustarlo. Para tal fin había comprado una vela y desenterrado una calavera humana, a la que en toda la tarde había limpiado cuidadosamente con aceite. Cuando considera llegado el momento, se coloca en medio del sendero que va de la cocina al jardín, y arma allí un pequeño montículo con piedras donde asienta la vela, a la que cubre luego con la calavera, notando con alegría que la medida era exacta, pues el punto blanco de vela se asomaba por el orificio del cráneo. Cuando ve por fin acercarse al niño, prende la vela y al instante se enciende toda la calavera, produciéndose así una visión sobrecogedora. El niño, al verla, da un grito de terror, y salen los padres a ver lo que ocurre, mientras que el abuelo se escabulle evitando ser visto. Cuando por fin sale hacia la calle, el viejo se siente satisfecho de su venganza.
Explicación: