NO HAY TAL COSA.El filósofo y matemático francés René Descartes decidió examinar todo lo que él creía que conocía con certeza. Desechó todo con la excepción de una verdad que le pareció incontrovertible: “Cogito ergo sum”, es decir: “Pienso, luego existo”.Este atentado contra la idea de que se puede conocer la verdad ha perdurado hasta nuestro día. Por ejemplo, algunos filósofos dicen que, como el saber nos llega a través de los sentidos, que pueden engañarse, no es posible comprobar la veracidad de ningún conocimiento.
Claro que algunas personas quizá aleguen que mucho de este relativismo demuestra amplitud de miras y, por tanto, tiene un efecto positivo en la sociedad humana. Pero, ¿es realmente así? ¿Qué efecto tiene en ti ? ¿Crees que la verdad es relativa, o que no existe? En ese caso, buscarla debe parecerte una pérdida de tiempo.
NO HAY TAL COSA.El filósofo y matemático francés René Descartes decidió examinar todo lo que él creía que conocía con certeza. Desechó todo con la excepción de una verdad que le pareció incontrovertible: “Cogito ergo sum”, es decir: “Pienso, luego existo”.Este atentado contra la idea de que se puede conocer la verdad ha perdurado hasta nuestro día. Por ejemplo, algunos filósofos dicen que, como el saber nos llega a través de los sentidos, que pueden engañarse, no es posible comprobar la veracidad de ningún conocimiento.
Claro que algunas personas quizá aleguen que mucho de este relativismo demuestra amplitud de miras y, por tanto, tiene un efecto positivo en la sociedad humana. Pero, ¿es realmente así? ¿Qué efecto tiene en ti ? ¿Crees que la verdad es relativa, o que no existe? En ese caso, buscarla debe parecerte una pérdida de tiempo.
Ese punto de vista afectará tu futuro.