El término quedó acuñado en el célebre debate que a mediados del siglo XX mantuvieron personalidades de la historiografía y la economía más o menos cercanas al paradigma del materialismo histórico, en la versión inglesa o francesa (revistas Past and Present y Annales), como Maurice Dobb, Karl Polanyi, R. H. Tawney, Paul Sweezy, Kohachiro Takahashi, Christopher Hill, Georges Lefebvre, Giuliano Procacci, Eric Hobsbawm y John Merrington entre otros.1
Según el modelo de interpretación marxista, todos los cambios históricos están en principio determinados por los cambios de modos de producción: empujadas por la dinámica de las fuerzas productivas, las cambiantes relaciones de producción (técnicas y sociales) producen una intensificación de la lucha de clases, con los consecuentes cambios en la superestructura política e ideológica para adaptarse a las nuevas condiciones. Una lectura menos determinista interpreta que cada formación social histórica tiene dentro de sí una combinación de modos de producción particular, y que la influencia de la estructura en la superestructura es bidireccional.
Respuesta:
Debate historiográfico
El término quedó acuñado en el célebre debate que a mediados del siglo XX mantuvieron personalidades de la historiografía y la economía más o menos cercanas al paradigma del materialismo histórico, en la versión inglesa o francesa (revistas Past and Present y Annales), como Maurice Dobb, Karl Polanyi, R. H. Tawney, Paul Sweezy, Kohachiro Takahashi, Christopher Hill, Georges Lefebvre, Giuliano Procacci, Eric Hobsbawm y John Merrington entre otros.1
Según el modelo de interpretación marxista, todos los cambios históricos están en principio determinados por los cambios de modos de producción: empujadas por la dinámica de las fuerzas productivas, las cambiantes relaciones de producción (técnicas y sociales) producen una intensificación de la lucha de clases, con los consecuentes cambios en la superestructura política e ideológica para adaptarse a las nuevas condiciones. Una lectura menos determinista interpreta que cada formación social histórica tiene dentro de sí una combinación de modos de producción particular, y que la influencia de la estructura en la superestructura es bidireccional.
Explicación: