mathi14
Alrededor del siglo III de nuestra era, cuando el hombre pudo por fin dominar el arte de la elaboración del vidrio, (crisoles especiales, alta temperatura y la técnica del vaciado), apareció por fin el hoy famoso reloj de arena, con dos recipientes unidos por una estrecha garganta. La arena debía estar completamente seca y encontrar mecanismos que impidiera humedecerse, puesto que sin estos requisitos el reloj de arena ya no funcionaba normalmente. En el pasado los relojes de arena muy grandes eran difíciles de construir y manejar, sin embargo, Carlomagno ordenó confeccionar uno que solo había que darle vuelta cada 12 horas y eso