Con este precioso cuento corto de Hildegarde Swift, ‘El pequeño faro rojo’, podrás trabajar todos estos temas:
-La autoestima y amor propio.
-El valor de la humildad frente a la vanidad.
-La amistad frente a los celos.
-El sentimiento de tristeza.
Reflexión
Debemos saber que todos somos importantes, y nadie podrá hacernos sentir inferiores. Cada cual es único. Este es el principal mensaje que extraemos del cuento ‘El pequeño faro rojo’, pero hay más:
Ni más ni menos que nadie: Al principio, el pequeño faro rojo era único en aquel lugar. Al no tener a nadie cerca que pudiera complementar su trabajo, se sentía tan importante que su vanidad fue aumentando hasta pensar que el río no podía vivir sin él.
Cada cual es único: El puente consiguió hacer ver al faro que él seguía siendo importante. La luz del puente tenía otra misión. No estaba allí para iluminar a los barcos, sino a los aviones. El pequeño faro rojo se había dejado llevar por la tristeza y ésta a veces nos lleva a pensar cosas equivocadas.
Los celos y la tristeza del faro: El pequeño faro rojo vio crecer al puente y en principio le vio como un enemigo que iba a robarle su trabajo y su importancia. Comenzó a sentir celos, luego frustración, para terminar en tristeza
Respuesta:
Con este precioso cuento corto de Hildegarde Swift, ‘El pequeño faro rojo’, podrás trabajar todos estos temas:
-La autoestima y amor propio.
-El valor de la humildad frente a la vanidad.
-La amistad frente a los celos.
-El sentimiento de tristeza.
Reflexión
Debemos saber que todos somos importantes, y nadie podrá hacernos sentir inferiores. Cada cual es único. Este es el principal mensaje que extraemos del cuento ‘El pequeño faro rojo’, pero hay más:
Ni más ni menos que nadie: Al principio, el pequeño faro rojo era único en aquel lugar. Al no tener a nadie cerca que pudiera complementar su trabajo, se sentía tan importante que su vanidad fue aumentando hasta pensar que el río no podía vivir sin él.
Cada cual es único: El puente consiguió hacer ver al faro que él seguía siendo importante. La luz del puente tenía otra misión. No estaba allí para iluminar a los barcos, sino a los aviones. El pequeño faro rojo se había dejado llevar por la tristeza y ésta a veces nos lleva a pensar cosas equivocadas.
Los celos y la tristeza del faro: El pequeño faro rojo vio crecer al puente y en principio le vio como un enemigo que iba a robarle su trabajo y su importancia. Comenzó a sentir celos, luego frustración, para terminar en tristeza