La Academia y muchos entendidos consideran que el sistema de tildar basado en palabras agudas, graves, esdrújulas y sobreesdrújulas es un orgullo del español. Ese sistema es el que se aplica normalmente para enseñar a tildar en la escuela. Sin embargo, aun aceptando que el sistema tiene algunos méritos, hay que reconocer que la gran mayoría de los hispanohablantes no lo asimila y comete frecuentes errores en esta materia. (En un estudio realizado entre estudiantes de último año de secundaria en España se encontró que el 94% cometía errores a la hora de tildar. En Colombia y en el resto de los países hispanohablantes la cifra debe ser similar.)
Las reglas básicas son la de los monosílabos y las tres reglas generales de acentuación. El gran inconveniente es que todas estas reglas se basan en el concepto no siempre obvio del número de las sílabas, tienen numerosas excepciones (que no suelen mencionarse en el momento de enunciarlas) y en algunas ocasiones van en contravía de la pronunciación. Si antes ya existían dificultades, los últimos “desarrollos” teóricos de admitir doble acentuación en palabras como guión, huí, crié, lió, etc., y de tildar las formas verbales con enclíticos de acuerdo con las reglas generales no parecen contribuir a superarlas.
Según la teoría de las sílabas (vocales abiertas y cerradas, diptongos, hiatos y triptongos), guión, huí, crié, lió, etc., son monosilábicas y por tanto ―a pesar de que todo el mundo las pronuncia tónicas― según la regla de los monosílabos no corresponde escribirlas con tilde. No obstante, la Academia admite tildarlas “si quien escribe las considera bisílabas”. Pero para considerarlas bisílabas es necesario hacer caso omiso de la teoría de las sílabas. ¿Qué valor tiene una regla de la que se puede prescindir con tanta facilidad? Ahora bien, si huí, crié y lió se pueden escribir con tilde, ¿por qué no podemos hacer lo mismo con fui, fue y dio? ¿La escritura se debe ajustar al habla o a las reglas? En vista de que la escritura es una representación del habla, es obvio que en lo posible deba buscarse la coincidencia entre ambas.
La regla básica de acentuación debería ser: Se marca tilde sobre las vocales fuertemente acentuadas, y sólo sobre ellas. Yo llamo a esta regla "Regla de Oro". En este caso tendríamos el problema de la interpretación de la palabra “fuertemente”, que podríamos resolver ―ahí sí― con la ayuda de las reglas generales de acentuación vigentes, las cuales vendrían a ser reglas complementarias casi sin ninguna de las excepciones actuales.
Creo que este enfoque daría mejores resultados que la teoría actual porque de entrada establecería una importante diferencia entre las vocales tildadas y las vocales sin tildar. En realidad, esta diferencia es tan grande en la pronunciación que las primeras bien merecerían incluirse en el alfabeto: piénsese en la diferencia entre cabra y cabrá, cante y canté, oro y oró,público, publico y publicó, etc.
La acentuación de los verbos con terminaciones enclíticas presenta un problema parecido a la actual regla de los monosílabos: en algunos casos obliga a pensar antes de escribir y también puede resultar claramente contraria a la pronunciación. Por ejemplo, dé (de dar) y esté se escriben con tilde, pero dele y estese (¡me los subrayó el corrector de Word!) ―según la última norma― no llevan tilde a pesar de que no cambia la pronunciación al pasar de las primeras a las segundas. En este caso también se prefirió aplicar la regla en lugar de privilegiar la pronunciación.
Debate
¿A qué se debe tanta falla en las tildes? ¿Se debe buscar una forma distinta de enseñar las tildes? ¿Se oye la tilde? ¿Qué es más importante, las reglas o la pronunciación? ¿Qué pasaría si se adoptase la Regla de Oro? ¿Convendría abolir la regla de los monosílabos? ¿Es lógico tener que escribir "hoy por mí (con tilde) y mañana por ti (sin tilde)", "concedió" pero "dio", "fe" pero "té", etc.? ¿Por qué no se escribe "felíz" sino "feliz"? ¿Debería la teoría de las sílabas enseñarse antes de las reglas de acentuación? ¿Hacen falta esas reglas? ¿Deberían enunciarse con sus excepciones? ¿Debería cambiarse la escritura aceptada de algunas palabras para ajustarla a la pronunciación? ¿Convendría admitir más palabras con dos formas de tildar? suerte espero que te sirva
La Academia y muchos entendidos consideran que el sistema de tildar basado en palabras agudas, graves, esdrújulas y sobreesdrújulas es un orgullo del español. Ese sistema es el que se aplica normalmente para enseñar a tildar en la escuela. Sin embargo, aun aceptando que el sistema tiene algunos méritos, hay que reconocer que la gran mayoría de los hispanohablantes no lo asimila y comete frecuentes errores en esta materia. (En un estudio realizado entre estudiantes de último año de secundaria en España se encontró que el 94% cometía errores a la hora de tildar. En Colombia y en el resto de los países hispanohablantes la cifra debe ser similar.)
Las reglas básicas son la de los monosílabos y las tres reglas generales de acentuación. El gran inconveniente es que todas estas reglas se basan en el concepto no siempre obvio del número de las sílabas, tienen numerosas excepciones (que no suelen mencionarse en el momento de enunciarlas) y en algunas ocasiones van en contravía de la pronunciación. Si antes ya existían dificultades, los últimos “desarrollos” teóricos de admitir doble acentuación en palabras como guión, huí, crié, lió, etc., y de tildar las formas verbales con enclíticos de acuerdo con las reglas generales no parecen contribuir a superarlas.
Según la teoría de las sílabas (vocales abiertas y cerradas, diptongos, hiatos y triptongos), guión, huí, crié, lió, etc., son monosilábicas y por tanto ―a pesar de que todo el mundo las pronuncia tónicas― según la regla de los monosílabos no corresponde escribirlas con tilde. No obstante, la Academia admite tildarlas “si quien escribe las considera bisílabas”. Pero para considerarlas bisílabas es necesario hacer caso omiso de la teoría de las sílabas. ¿Qué valor tiene una regla de la que se puede prescindir con tanta facilidad? Ahora bien, si huí, crié y lió se pueden escribir con tilde, ¿por qué no podemos hacer lo mismo con fui, fue y dio? ¿La escritura se debe ajustar al habla o a las reglas? En vista de que la escritura es una representación del habla, es obvio que en lo posible deba buscarse la coincidencia entre ambas.
La regla básica de acentuación debería ser: Se marca tilde sobre las vocales fuertemente acentuadas, y sólo sobre ellas. Yo llamo a esta regla "Regla de Oro". En este caso tendríamos el problema de la interpretación de la palabra “fuertemente”, que podríamos resolver ―ahí sí― con la ayuda de las reglas generales de acentuación vigentes, las cuales vendrían a ser reglas complementarias casi sin ninguna de las excepciones actuales.
Creo que este enfoque daría mejores resultados que la teoría actual porque de entrada establecería una importante diferencia entre las vocales tildadas y las vocales sin tildar. En realidad, esta diferencia es tan grande en la pronunciación que las primeras bien merecerían incluirse en el alfabeto: piénsese en la diferencia entre cabra y cabrá, cante y canté, oro y oró,público, publico y publicó, etc.
La acentuación de los verbos con terminaciones enclíticas presenta un problema parecido a la actual regla de los monosílabos: en algunos casos obliga a pensar antes de escribir y también puede resultar claramente contraria a la pronunciación. Por ejemplo, dé (de dar) y esté se escriben con tilde, pero dele y estese (¡me los subrayó el corrector de Word!) ―según la última norma― no llevan tilde a pesar de que no cambia la pronunciación al pasar de las primeras a las segundas. En este caso también se prefirió aplicar la regla en lugar de privilegiar la pronunciación.
Debate
¿A qué se debe tanta falla en las tildes? ¿Se debe buscar una forma distinta de enseñar las tildes? ¿Se oye la tilde? ¿Qué es más importante, las reglas o la pronunciación? ¿Qué pasaría si se adoptase la Regla de Oro? ¿Convendría abolir la regla de los monosílabos? ¿Es lógico tener que escribir "hoy por mí (con tilde) y mañana por ti (sin tilde)", "concedió" pero "dio", "fe" pero "té", etc.? ¿Por qué no se escribe "felíz" sino "feliz"? ¿Debería la teoría de las sílabas enseñarse antes de las reglas de acentuación? ¿Hacen falta esas reglas? ¿Deberían enunciarse con sus excepciones? ¿Debería cambiarse la escritura aceptada de algunas palabras para ajustarla a la pronunciación? ¿Convendría admitir más palabras con dos formas de tildar? suerte espero que te sirva