Estas heridas pueden dejarte con sentimientos duraderos de enojo y amargura — y hasta deseos de venganza. Pero si no aprendes a perdonar, quizás seas tú quien pague el precio más alto. Al aceptar el perdón también podrás adoptar paz, esperanza, gratitud y alegría.
El perdón es importante porque toda falta de perdón produce siempre un alejamiento.
Y porque al quedar una ofensa o pecado pendiente siempre produce amargura de quien la sufre. El que guarda una raíz de amargura en su corazón está pecando directamente contra Dios y no puede tener una vida de éxito y provecho en el Señor.
cuando no perdonamos (oh no lo practicas) , lo que está sucediendo en nuestro interior es que decimos que somos superiores a Dios y que la ofensa cometida es mayor a las que ofenden a Dios y que esto no puede ser perdonado
Respuesta:
Explicación:
Estas heridas pueden dejarte con sentimientos duraderos de enojo y amargura — y hasta deseos de venganza. Pero si no aprendes a perdonar, quizás seas tú quien pague el precio más alto. Al aceptar el perdón también podrás adoptar paz, esperanza, gratitud y alegría.
El perdón es importante porque toda falta de perdón produce siempre un alejamiento.
Y porque al quedar una ofensa o pecado pendiente siempre produce amargura de quien la sufre. El que guarda una raíz de amargura en su corazón está pecando directamente contra Dios y no puede tener una vida de éxito y provecho en el Señor.
cuando no perdonamos (oh no lo practicas) , lo que está sucediendo en nuestro interior es que decimos que somos superiores a Dios y que la ofensa cometida es mayor a las que ofenden a Dios y que esto no puede ser perdonado