Asignar recursos para el uso de la evidencia y hacer que alguien tome el trabajo de incorporar esta evidencia al diseño de políticas públicas. El gobierno debe asignar recursos para evaluaciones de programas y políticas a través de sus propios fondos o donaciones. También debe contratar personal o asignar funcionarios al uso de datos y de evidencia en evaluaciones y planificando nuevas políticas.
Crear espacios donde se impulse y recompense el uso de la evidencia. A menudo, las responsabilidades diarias de los hacedores de política no les dejan tiempo para diseñar nuevas políticas o procesos. Asignar espacios físicos y agendas específicas puede permitir el intercambio de experiencias y el desarrollo de propuestas que incluyan datos y evidencia.
Invertir en la recopilación de datos administrativos, la gestión, y el intercambio de información interinstitucional. El acceso a los datos es clave. Recolectar y desarrollar sistemas administrativos de datos que permitan a los oficiales públicos el uso regular de datos y de la evidencia en sus programas de gestión y en la implementación también puede llegar lejos.
Colaborar con organizaciones e investigadores que fomenten el uso de la evidencia en las políticas. Las organizaciones e investigadores que tienen experiencia en generar, sintetizar y aplicar datos y evidencia pueden ser socios valiosos para complementar los esfuerzos de los gobiernos en el uso datos y evidencia de manera sistemática.
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Respuesta:
Asignar recursos para el uso de la evidencia y hacer que alguien tome el trabajo de incorporar esta evidencia al diseño de políticas públicas. El gobierno debe asignar recursos para evaluaciones de programas y políticas a través de sus propios fondos o donaciones. También debe contratar personal o asignar funcionarios al uso de datos y de evidencia en evaluaciones y planificando nuevas políticas.
Crear espacios donde se impulse y recompense el uso de la evidencia. A menudo, las responsabilidades diarias de los hacedores de política no les dejan tiempo para diseñar nuevas políticas o procesos. Asignar espacios físicos y agendas específicas puede permitir el intercambio de experiencias y el desarrollo de propuestas que incluyan datos y evidencia.
Invertir en la recopilación de datos administrativos, la gestión, y el intercambio de información interinstitucional. El acceso a los datos es clave. Recolectar y desarrollar sistemas administrativos de datos que permitan a los oficiales públicos el uso regular de datos y de la evidencia en sus programas de gestión y en la implementación también puede llegar lejos.
Colaborar con organizaciones e investigadores que fomenten el uso de la evidencia en las políticas. Las organizaciones e investigadores que tienen experiencia en generar, sintetizar y aplicar datos y evidencia pueden ser socios valiosos para complementar los esfuerzos de los gobiernos en el uso datos y evidencia de manera sistemática.
explicación:
no se respondi al asar