En el gimnasio, en el trabajo o incluso dentro de la familia es frecuente encontrarse con personas difíciles de tratar. Los hay invasores profesionales del espacio individual, que hacen de la clase de entrenamiento funcional un tormento. Luego están los compañeros vampiros energéticos y saboteadores profesionales en la oficina. Por supuesto, no nos olvidamos del pariente metomentodo o que siempre tiene una puntilla que añadir.
Respuesta:
En el gimnasio, en el trabajo o incluso dentro de la familia es frecuente encontrarse con personas difíciles de tratar. Los hay invasores profesionales del espacio individual, que hacen de la clase de entrenamiento funcional un tormento. Luego están los compañeros vampiros energéticos y saboteadores profesionales en la oficina. Por supuesto, no nos olvidamos del pariente metomentodo o que siempre tiene una puntilla que añadir.
Explicación:
espero que te sirva me das coronita