En las elecciones presidenciales de 1951, el exiliado líder del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), Víctor Paz Estenssoro, alcanza casi la mitad de los votos emitidos, pero la élite política-minera trata de impedir la elección de Víctor Paz Estenssoro y entrega el gobierno a una junta militar a la cabeza del general Hugo Ballivián.
En Abril de 1952, comienza la Revolución Nacional, un proceso de transformaciones en la participación ciudadana, distribución de tierras, el control del Estado sobre los recursos naturales y la economía boliviana.
A fines de la década de 1950, la economía boliviana sufre el descenso continuo de los precios del estaño en los mercados mundiales y altos índices de inflación.
El gobierno militar de René Barrientos lleva a cabo políticas de desarrollo económico que permiten el retorno de la inversión extranjera a la industria minera del estaño.
Tras la muerte de Barrientos tras su muerte en 1969, suceden una serie de gobiernos de corta duración. En 1971, el coronel Hugo Banzer Suárez toma el poder tras derrocar al general Juan José Torres.
El 17 de julio de 1980, el general Luis García Meza da un golpe de estado derrocando a la presidenta constitucional interina Lidia Gueiler Tejada, y evitando así que el ganador de las elecciones Hernán Siles Zuazo asuma la Presidencia.
La década de 1980 presenta el retorno de la democracia y una crisis económica profunda. Durante esta época caen los precios del estaño internacionalmente, el país vive ajustes para pagar la deuda externa contraida en gobiernos anteriores e hiperinflación. Comienza el auge del narcotráfico por la producción ilegal de cocaína.
La primera década del siglo XXI presenta una profunda crisis económica e inestabilidad política, lo cual permite el surgimiento de movimientos sociales, principalmente campesinos indígenas, mineros, vendedores ambulantes y cocaleros que hacen ingobernable al país.
Evo Morales resulta electo poniendo en práctica políticas nacionalistas e indigenistas de izquierda, aliándose al gobierno de Chávez en Venezuela y de Castro en Cuba. Se estatizan las empresas de hidrocarburos y telecomunicaciones que en la pasada década habían sido privatizadas.
En las elecciones presidenciales de 1951, el exiliado líder del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), Víctor Paz Estenssoro, alcanza casi la mitad de los votos emitidos, pero la élite política-minera trata de impedir la elección de Víctor Paz Estenssoro y entrega el gobierno a una junta militar a la cabeza del general Hugo Ballivián.
En Abril de 1952, comienza la Revolución Nacional, un proceso de transformaciones en la participación ciudadana, distribución de tierras, el control del Estado sobre los recursos naturales y la economía boliviana.
A fines de la década de 1950, la economía boliviana sufre el descenso continuo de los precios del estaño en los mercados mundiales y altos índices de inflación.
El gobierno militar de René Barrientos lleva a cabo políticas de desarrollo económico que permiten el retorno de la inversión extranjera a la industria minera del estaño.
Tras la muerte de Barrientos tras su muerte en 1969, suceden una serie de gobiernos de corta duración. En 1971, el coronel Hugo Banzer Suárez toma el poder tras derrocar al general Juan José Torres.
El 17 de julio de 1980, el general Luis García Meza da un golpe de estado derrocando a la presidenta constitucional interina Lidia Gueiler Tejada, y evitando así que el ganador de las elecciones Hernán Siles Zuazo asuma la Presidencia.
La década de 1980 presenta el retorno de la democracia y una crisis económica profunda. Durante esta época caen los precios del estaño internacionalmente, el país vive ajustes para pagar la deuda externa contraida en gobiernos anteriores e hiperinflación. Comienza el auge del narcotráfico por la producción ilegal de cocaína.
La primera década del siglo XXI presenta una profunda crisis económica e inestabilidad política, lo cual permite el surgimiento de movimientos sociales, principalmente campesinos indígenas, mineros, vendedores ambulantes y cocaleros que hacen ingobernable al país.
Evo Morales resulta electo poniendo en práctica políticas nacionalistas e indigenistas de izquierda, aliándose al gobierno de Chávez en Venezuela y de Castro en Cuba. Se estatizan las empresas de hidrocarburos y telecomunicaciones que en la pasada década habían sido privatizadas.