En torno al 80 % del agua dulce consumida en Europa (para consumo humano y otros usos) procede de ríos y aguas subterráneas, lo que hace que estas fuentes sean extremadamente vulnerables frente a las amenazas que suponen la sobreexplotación, la contaminación y el cambio climático.
Respuesta:
En torno al 80 % del agua dulce consumida en Europa (para consumo humano y otros usos) procede de ríos y aguas subterráneas, lo que hace que estas fuentes sean extremadamente vulnerables frente a las amenazas que suponen la sobreexplotación, la contaminación y el cambio climático.