Respuesta:Cualquier época de la historia humana tiene su reflejo en el terreno ideológico. Resulta inevitable, por tanto, que en toda época de cierta reacción social el pensamiento político tienda a retroceder hacia atrás hasta etapas ya superadas desde hace mucho tiempo. León Trotsky, a propósito de esto, escribía: “En estas condiciones la tarea de la vanguardia consiste, ante todo, en no dejarse sugestionar por el reflujo general: es necesario avanzar contra la corriente. Si las desfavorables relaciones de fuerzas no permiten conservar las antiguas posiciones políticas, por lo menos hay que conservar las posiciones ideológicas, pues la experiencia tan valiosa del pasado se ha concentrado en ellas. Ante los ojos de los mentecatos, tal política aparece como ‘sectaria’. En realidad no hace más que preparar un salto gigantesco hacia adelante impulsada por la oleada ascendente del nuevo período histórico”.
Esta frase enormemente inspiradora del gran revolucionario ruso nos traza la tarea fundamental que hemos de encarar los marxistas en el momento actual, para continuar en la lucha por la transformación socialista de la sociedad.
La caída del estalinismo, hace ahora una década, dio paso a una campaña sin precedentes desatada por la burguesía y sus acólitos en todo el mundo, contra las genuinas ideas del marxismo y del socialismo. Esto, unido a la relativa estabilidad económica y social vivida por los principales países capitalistas avanzados en los últimos veinte años, y a la persistencia del actual boom económico, ha sido aprovechado para sentenciar a muerte, una vez más, a toda idea de transformación social.
Respuesta:Cualquier época de la historia humana tiene su reflejo en el terreno ideológico. Resulta inevitable, por tanto, que en toda época de cierta reacción social el pensamiento político tienda a retroceder hacia atrás hasta etapas ya superadas desde hace mucho tiempo. León Trotsky, a propósito de esto, escribía: “En estas condiciones la tarea de la vanguardia consiste, ante todo, en no dejarse sugestionar por el reflujo general: es necesario avanzar contra la corriente. Si las desfavorables relaciones de fuerzas no permiten conservar las antiguas posiciones políticas, por lo menos hay que conservar las posiciones ideológicas, pues la experiencia tan valiosa del pasado se ha concentrado en ellas. Ante los ojos de los mentecatos, tal política aparece como ‘sectaria’. En realidad no hace más que preparar un salto gigantesco hacia adelante impulsada por la oleada ascendente del nuevo período histórico”.
Esta frase enormemente inspiradora del gran revolucionario ruso nos traza la tarea fundamental que hemos de encarar los marxistas en el momento actual, para continuar en la lucha por la transformación socialista de la sociedad.
La caída del estalinismo, hace ahora una década, dio paso a una campaña sin precedentes desatada por la burguesía y sus acólitos en todo el mundo, contra las genuinas ideas del marxismo y del socialismo. Esto, unido a la relativa estabilidad económica y social vivida por los principales países capitalistas avanzados en los últimos veinte años, y a la persistencia del actual boom económico, ha sido aprovechado para sentenciar a muerte, una vez más, a toda idea de transformación social.
Explicación:espero te sirva