El determinismo metafísico, justamente, se encarga de explicar todos y cada uno de los fenómenos de la existencia, con la ayuda de elementos y factores sobrenaturales (en efecto, metafísicos). La metafísica va más allá de la existencia mundana, de manera que entes como Dios y el Espíritu Santo pueden incidir en el funcionamiento de distintos fenómenos, donde todo mantiene un hilo de coherencia y explicación recíproca.
El determinismo metafísico, justamente, se encarga de explicar todos y cada uno de los fenómenos de la existencia, con la ayuda de elementos y factores sobrenaturales (en efecto, metafísicos). La metafísica va más allá de la existencia mundana, de manera que entes como Dios y el Espíritu Santo pueden incidir en el funcionamiento de distintos fenómenos, donde todo mantiene un hilo de coherencia y explicación recíproca.