Diría que ese interés es destructivo,los anuncios ya no sólo venden productos, también venden valores, imagen y conceptos sobre el amor, la sexualidad, el éxito y quizás lo que es más importante, venden una imagen de normalidad,supuesta normalidad. En gran medida,tratan de eliminar lo que somos y nos imponen lo que deberíamos ser según ellos.
Ese tipo de publicidad se centra en lo físico y nos da la creencia (desde muy temprana edad) de que debemos ponerle demasiada dedicación,dinero y energía para alcanzar el ideal de belleza que vemos.
Diría que ese interés es destructivo,los anuncios ya no sólo venden productos, también venden valores, imagen y conceptos sobre el amor, la sexualidad, el éxito y quizás lo que es más importante, venden una imagen de normalidad,supuesta normalidad. En gran medida,tratan de eliminar lo que somos y nos imponen lo que deberíamos ser según ellos.
Ese tipo de publicidad se centra en lo físico y nos da la creencia (desde muy temprana edad) de que debemos ponerle demasiada dedicación,dinero y energía para alcanzar el ideal de belleza que vemos.