Hay ocasiones en que las células dañadas no se eliminan y aunque aún no está muy claro por qué sucede esto, a veces se debe a que el daño es crónico o a que estamos envejeciendo.
“El problema con las células dañadas que no eliminan es que pueden permanecer mucho tiempo en nuestros tejidos y producen constantemente una respuesta inflamatoria”, sostiene Serrano. Estas células que no funcionan y que se deberían haber eliminado son las denominadas células zombis, las cuales son perjudiciales para el tejido donde se acumulan y eliminarlas farmacológicamente es un desafío de la ciencia.
Respuesta:
Hay ocasiones en que las células dañadas no se eliminan y aunque aún no está muy claro por qué sucede esto, a veces se debe a que el daño es crónico o a que estamos envejeciendo.
“El problema con las células dañadas que no eliminan es que pueden permanecer mucho tiempo en nuestros tejidos y producen constantemente una respuesta inflamatoria”, sostiene Serrano. Estas células que no funcionan y que se deberían haber eliminado son las denominadas células zombis, las cuales son perjudiciales para el tejido donde se acumulan y eliminarlas farmacológicamente es un desafío de la ciencia.