¿ que continuidades se identifican en la organización político-social de la época moderna respecto (en comparación) de la medieval? porfa es de historia y urgente unu doy corona :c
La época moderna es un apasionante período histórico que va desde finales del siglo XV hasta los inicios del siglo XIX. A lo largo de etapa la sociedad europea asume cambios tan relevantes como la consolidación de las monarquías absolutas, la conquista y explotación de territorios jamás explorados, la revolución científica y las diferentes rupturas que pretenden reformar las iglesias cristianas. Unos cambios que fluyen en paralelo a la mutación, mucho más lenta, de las pautas de sociabilidad, de la organización de los trabajos agrícolas y menestrales, y de los entramados del gobierno.
Lleida vive con intensidad estos años. Los asedios a la ciudad durante la guerra de los Segadors y la de Sucesión obligan a desacralizar la Seu Vella y a convertirla en cuartel militar (1707), a la vez que comportan la construcción de una nueva catedral. El desmantelamiento del antiguo templo implicó también la dispersión de su mobiliario litúrgico, que incluía retablos e imágenes, el coro de la nave central y muchos otros bienes artísticos que la embellecían.
El arte, a inicios del siglo XVI, empieza a introducir formas renacentistas, seguidas por el esplendor del barroco, hasta llegar a los renovados proyectos de los ilustrados en el neoclásico. A finales del setecientos, Lleida es una ciudad renovada, más poblada y en actividad incesante, que se encara al inicio de nuevos tiempos
Respuesta:
La época moderna es un apasionante período histórico que va desde finales del siglo XV hasta los inicios del siglo XIX. A lo largo de etapa la sociedad europea asume cambios tan relevantes como la consolidación de las monarquías absolutas, la conquista y explotación de territorios jamás explorados, la revolución científica y las diferentes rupturas que pretenden reformar las iglesias cristianas. Unos cambios que fluyen en paralelo a la mutación, mucho más lenta, de las pautas de sociabilidad, de la organización de los trabajos agrícolas y menestrales, y de los entramados del gobierno.
Lleida vive con intensidad estos años. Los asedios a la ciudad durante la guerra de los Segadors y la de Sucesión obligan a desacralizar la Seu Vella y a convertirla en cuartel militar (1707), a la vez que comportan la construcción de una nueva catedral. El desmantelamiento del antiguo templo implicó también la dispersión de su mobiliario litúrgico, que incluía retablos e imágenes, el coro de la nave central y muchos otros bienes artísticos que la embellecían.
El arte, a inicios del siglo XVI, empieza a introducir formas renacentistas, seguidas por el esplendor del barroco, hasta llegar a los renovados proyectos de los ilustrados en el neoclásico. A finales del setecientos, Lleida es una ciudad renovada, más poblada y en actividad incesante, que se encara al inicio de nuevos tiempos
Explicación:
eso es todo