En política, la derecha es el segmento del espectro político que afirma que determinados órdenes sociales y jerarquías son inevitables o deseables, apoyándose por lo general sobre la naturaleza humana, el derecho natural, la economía o la tradición.[1][2][3][4][5][6][7][8][9] Estas jerarquías son vistas por la derecha como producto natural de la competencia en las economías de mercado o simplemente como una consecuencia inevitable de las diferencias en la personalidad de los individuos.
Gráfico que muestra el espectro político de izquierda a derecha que según Hans Eysenck se puede graficar en la brújula política.
En Europa, la derecha es una concepto que engloba ideas muy heterogéneas: incluye liberales, nacionalistas, la oposición a la inmigración,[10] la democracia cristiana y también algunos movimientos de ideas anticapitalistas, incluyendo el tradicionalismo, el nacionalsindicalismo o el fascismo. Algunos derechistas europeos se oponen al capitalismo contemporáneo, argumentando que fomenta el egoísmo y el materialismo.[11][12] En Estados Unidos, el vínculo entre la derecha política y el capitalismo es más estrecho.[cita requerida]
No existe una definición unívoca de derecha aunque dadas un conjunto de dicotomías como el individualismo frente a colectivismo, confesionalidad frente a laicismo, propiedad privada frente a propiedad pública de ciertas actividades económicas, igualdad de oportunidades frente a igualdad de resultados, tradicionalismo frente a reformismo social, conservadurismo frente a progresismo, liberalismo frente al comunismo, la derecha se decanta estadísticamente por las primeras componentes de cada una de ellas en mayor proporción que la izquierda. Actualmente, el discurso político de la mayor parte de fuerzas de derecha habla favorablemente de la riqueza a través de la libre competencia.[13]
El término derecha política tiene muchas connotaciones e ideas conflictivas en la actualidad.[14] Engloba por tanto a corrientes ideológicas muy diversas cuya separación puede ser tajante, aunque también pueden ser compatibles, que ante todo busquen el mantenimiento del orden social establecido (tradicionalismo, conservadurismo). En oposición a la izquierda política, el sector más liberal enfatiza el libre mercado por encima del intervencionismo de las administraciones públicas y busca potenciar valores y derechos individuales, frente a posiciones colectivistas, redistributivas o estatistas, mientras que el sector más conservador es partidario del encuadramiento colectivo en estructuras rígidamente jerarquizadas y disciplinadas.
Respuesta:
En política, la derecha es el segmento del espectro político que afirma que determinados órdenes sociales y jerarquías son inevitables o deseables, apoyándose por lo general sobre la naturaleza humana, el derecho natural, la economía o la tradición.[1][2][3][4][5][6][7][8][9] Estas jerarquías son vistas por la derecha como producto natural de la competencia en las economías de mercado o simplemente como una consecuencia inevitable de las diferencias en la personalidad de los individuos.
Gráfico que muestra el espectro político de izquierda a derecha que según Hans Eysenck se puede graficar en la brújula política.
En Europa, la derecha es una concepto que engloba ideas muy heterogéneas: incluye liberales, nacionalistas, la oposición a la inmigración,[10] la democracia cristiana y también algunos movimientos de ideas anticapitalistas, incluyendo el tradicionalismo, el nacionalsindicalismo o el fascismo. Algunos derechistas europeos se oponen al capitalismo contemporáneo, argumentando que fomenta el egoísmo y el materialismo.[11][12] En Estados Unidos, el vínculo entre la derecha política y el capitalismo es más estrecho.[cita requerida]
No existe una definición unívoca de derecha aunque dadas un conjunto de dicotomías como el individualismo frente a colectivismo, confesionalidad frente a laicismo, propiedad privada frente a propiedad pública de ciertas actividades económicas, igualdad de oportunidades frente a igualdad de resultados, tradicionalismo frente a reformismo social, conservadurismo frente a progresismo, liberalismo frente al comunismo, la derecha se decanta estadísticamente por las primeras componentes de cada una de ellas en mayor proporción que la izquierda. Actualmente, el discurso político de la mayor parte de fuerzas de derecha habla favorablemente de la riqueza a través de la libre competencia.[13]
El término derecha política tiene muchas connotaciones e ideas conflictivas en la actualidad.[14] Engloba por tanto a corrientes ideológicas muy diversas cuya separación puede ser tajante, aunque también pueden ser compatibles, que ante todo busquen el mantenimiento del orden social establecido (tradicionalismo, conservadurismo). En oposición a la izquierda política, el sector más liberal enfatiza el libre mercado por encima del intervencionismo de las administraciones públicas y busca potenciar valores y derechos individuales, frente a posiciones colectivistas, redistributivas o estatistas, mientras que el sector más conservador es partidario del encuadramiento colectivo en estructuras rígidamente jerarquizadas y disciplinadas.