Emiliano, rifle en mano, se paró frente al coahuilense y, señalando su reloj, le dijo: “Mire señor Madero, si yo, aprovechándome de que estoy armado le quito su reloj y me lo guardo y andando el tiempo nos llegamos a encontrar, los dos armados, con igual fuerza, ¿tendría derecho a exigirme su devolución?
Respuesta:
Emiliano, rifle en mano, se paró frente al coahuilense y, señalando su reloj, le dijo: “Mire señor Madero, si yo, aprovechándome de que estoy armado le quito su reloj y me lo guardo y andando el tiempo nos llegamos a encontrar, los dos armados, con igual fuerza, ¿tendría derecho a exigirme su devolución?