La comida durante la era paleolítica era variada dependiendo de los diferentes hábitats donde vivían los seres humanos, en este sentido no corresponde exactamente a la recreación que afirma la moderna dieta paleolítica. Durante el Paleolítico los cazadores-recolectores comían principalmente carne, pescado, verduras, frutos secos e insectos en diversas proporciones.
Sin embargo hay poca evidencia de la relativa proporción de los alimentos de origen animal y vegetal. Según algunos antropólogos y los partidarios de la dieta paleolítica moderna, consumían cantidades significativas de carne y posiblemente la mayoría de los alimentos eran obtenidos de la caza. Una hipótesis contraria cree que los seres humanos del paleolítico comían plantas como base de su dieta en general, o que la caza y la recolección también contribuían igualmente a su dieta. Una hipótesis sostiene que comieron grandes cantidades de raíces subterráneas antes del advenimiento de la agricultura. Las proporciones relativas de las plantas y animales en la comida posiblemente variaron entre las regiones. Por ejemplo en las regiones tropicales de África probablemente la dieta se basaba en plantas, mientras que en regiones más frías como el norte de Europa predominó la carne.
La comida durante la era paleolítica era variada dependiendo de los diferentes hábitats donde vivían los seres humanos, en este sentido no corresponde exactamente a la recreación que afirma la moderna dieta paleolítica. Durante el Paleolítico los cazadores-recolectores comían principalmente carne, pescado, verduras, frutos secos e insectos en diversas proporciones.
Sin embargo hay poca evidencia de la relativa proporción de los alimentos de origen animal y vegetal. Según algunos antropólogos y los partidarios de la dieta paleolítica moderna, consumían cantidades significativas de carne y posiblemente la mayoría de los alimentos eran obtenidos de la caza. Una hipótesis contraria cree que los seres humanos del paleolítico comían plantas como base de su dieta en general, o que la caza y la recolección también contribuían igualmente a su dieta. Una hipótesis sostiene que comieron grandes cantidades de raíces subterráneas antes del advenimiento de la agricultura. Las proporciones relativas de las plantas y animales en la comida posiblemente variaron entre las regiones. Por ejemplo en las regiones tropicales de África probablemente la dieta se basaba en plantas, mientras que en regiones más frías como el norte de Europa predominó la carne.