Qué pueden hacer las escuelas para mantener a los estudiantes seguros
Para garantizar que los estudiantes y el personal puedan mantenerse saludables, además de estar físicamente juntos en la escuela, aquí hay recomendaciones clave de seguridad:
Vacunas contra el COVID-19
Todos los adultos y niños mayores de 12 años que actualmente son elegibles para recibir las vacunas contra el COVID-19 deben estar completamente inmunizados al comienzo del año escolar. Se considera que las personas están completamente vacunadas dos semanas después de su segunda dosis en una serie de dos dosis, como con las vacunas Pfizer o Moderna, o dos semanas después de una vacuna de dosis única como la de Johnson & Johnson.
Máscaras faciales
Todas las personas mayores de 2 años deben usar mascarillas que cubran la nariz y la boca. Esta es una herramienta simple y probada para ayudar a detener la propagación del virus entre estudiantes que no están vacunados contra el COVID-19 o han optado por no recibir la vacuna.
Cuando se ajustan bien y se usan correcta y consistentemente, las mascarillas son efectivas y seguras de usar durante largos períodos de tiempo, como durante el día escolar. La gran mayoría de los niños, incluso aquellos con afecciones médicas, pueden usar máscaras faciales de manera segura y efectiva con la práctica, el apoyo y el ejemplo de los adultos. Hable con el pediatra de su hijo sobre ciertas condiciones médicas y de desarrollo que prohibirían el uso de mascarillas.
Distanciamiento físico
Los estudiantes deben permanecer al menos a 3 pies (1 metro) de distancia dentro de las aulas cuando sea posible. En general, los CDC recomiendan que las personas que no estén completamente vacunadas mantengan una distancia física de al menos 6 pies (2 metros) de otras personas que no sean de su entorno u hogar. Sin embargo, varios estudios del año escolar 2020-2021 muestran niveles bajos de transmisión de COVID-19 entre estudiantes en escuelas que tenían menos de 6 pies de distancia física cuando la escuela utilizó otras estrategias de prevención, como el uso de máscaras.
Cuando sea posible, las escuelas deben usar espacios al aire libre y espacios no utilizados para la instrucción y las comidas para ayudar con el distanciamiento. Las actividades como cantar, tocar instrumentos y hacer ejercicio, por ejemplo, son más seguras al aire libre y dispersas.
Rutinas del aula
Para ayudar a limitar la interacción de los estudiantes fuera del aula, las escuelas deben considerar:
Hacer que los maestros se muevan entre las aulas, si es posible, en lugar de que los estudiantes llenen los pasillos durante los períodos de transición. Los horarios en bloque (menos clases en un día determinado y asignaturas optativas en períodos de tiempo más cortos) pueden ayudar a limitar el cruce de estudiantes y maestros.
Permitir que los estudiantes coman almuerzos en sus escritorios o en grupos pequeños al aire libre en lugar de en comedores abarrotados. Debido a la necesidad de quitarse las mascarillas mientras se come, es mejor mantener a los estudiantes no vacunados a una distancia de seis pies (2 metros) durante el almuerzo.
Dejar las puertas del salón de clases abiertas para ayudar a reducir las superficies de alto contacto, como los pomos de las puertas.
Cuando el clima y la calidad del aire lo permitan, abrir las ventanas y puertas para mejorar la circulación del aire. Se pueden utilizar ventiladores ubicados estratégicamente, que promuevan la circulación o disminuyan el aire estancado, para mejorar la circulación del aire exterior.
Respuesta:
espero que te sirva
Explicación:
Qué pueden hacer las escuelas para mantener a los estudiantes seguros
Para garantizar que los estudiantes y el personal puedan mantenerse saludables, además de estar físicamente juntos en la escuela, aquí hay recomendaciones clave de seguridad:
Vacunas contra el COVID-19
Todos los adultos y niños mayores de 12 años que actualmente son elegibles para recibir las vacunas contra el COVID-19 deben estar completamente inmunizados al comienzo del año escolar. Se considera que las personas están completamente vacunadas dos semanas después de su segunda dosis en una serie de dos dosis, como con las vacunas Pfizer o Moderna, o dos semanas después de una vacuna de dosis única como la de Johnson & Johnson.
Máscaras faciales
Todas las personas mayores de 2 años deben usar mascarillas que cubran la nariz y la boca. Esta es una herramienta simple y probada para ayudar a detener la propagación del virus entre estudiantes que no están vacunados contra el COVID-19 o han optado por no recibir la vacuna.
Cuando se ajustan bien y se usan correcta y consistentemente, las mascarillas son efectivas y seguras de usar durante largos períodos de tiempo, como durante el día escolar. La gran mayoría de los niños, incluso aquellos con afecciones médicas, pueden usar máscaras faciales de manera segura y efectiva con la práctica, el apoyo y el ejemplo de los adultos. Hable con el pediatra de su hijo sobre ciertas condiciones médicas y de desarrollo que prohibirían el uso de mascarillas.
Distanciamiento físico
Los estudiantes deben permanecer al menos a 3 pies (1 metro) de distancia dentro de las aulas cuando sea posible. En general, los CDC recomiendan que las personas que no estén completamente vacunadas mantengan una distancia física de al menos 6 pies (2 metros) de otras personas que no sean de su entorno u hogar. Sin embargo, varios estudios del año escolar 2020-2021 muestran niveles bajos de transmisión de COVID-19 entre estudiantes en escuelas que tenían menos de 6 pies de distancia física cuando la escuela utilizó otras estrategias de prevención, como el uso de máscaras.
Cuando sea posible, las escuelas deben usar espacios al aire libre y espacios no utilizados para la instrucción y las comidas para ayudar con el distanciamiento. Las actividades como cantar, tocar instrumentos y hacer ejercicio, por ejemplo, son más seguras al aire libre y dispersas.
Rutinas del aula
Para ayudar a limitar la interacción de los estudiantes fuera del aula, las escuelas deben considerar:
Hacer que los maestros se muevan entre las aulas, si es posible, en lugar de que los estudiantes llenen los pasillos durante los períodos de transición. Los horarios en bloque (menos clases en un día determinado y asignaturas optativas en períodos de tiempo más cortos) pueden ayudar a limitar el cruce de estudiantes y maestros.
Permitir que los estudiantes coman almuerzos en sus escritorios o en grupos pequeños al aire libre en lugar de en comedores abarrotados. Debido a la necesidad de quitarse las mascarillas mientras se come, es mejor mantener a los estudiantes no vacunados a una distancia de seis pies (2 metros) durante el almuerzo.
Dejar las puertas del salón de clases abiertas para ayudar a reducir las superficies de alto contacto, como los pomos de las puertas.
Cuando el clima y la calidad del aire lo permitan, abrir las ventanas y puertas para mejorar la circulación del aire. Se pueden utilizar ventiladores ubicados estratégicamente, que promuevan la circulación o disminuyan el aire estancado, para mejorar la circulación del aire exterior.