Cuando Él fue bautizado “se oyó una voz del cielo que decía: 'Este es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección'”. ... Es una manifestación de la Trinidad y también una revelación de Jesucristo, como el enviado por excelencia de Dios.
Respuesta:
Cuando Él fue bautizado “se oyó una voz del cielo que decía: 'Este es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección'”. ... Es una manifestación de la Trinidad y también una revelación de Jesucristo, como el enviado por excelencia de Dios.
Explicación: