Explicación: Cuando nos ponemos de cabeza, la sangre sigue siendo empujada por el corazón hacia la cabeza, y además de esto la atracción de la tierra ejerce su fuerza haciendo que la cantidad de sangre aumente en esta zona. Por este motivo el rostro se pone rojo cuando invertimos de posición,,y en los pies no,ya que el corazon continúa enviando la sangre a la cabeza y ésta deja de ir hacia los pies porque al no existir fuerza de gravedad, todos los líquidos van hacia arriba. En el espacio la sangre se reparte de manera distinta.
Respuesta:
Explicación: Cuando nos ponemos de cabeza, la sangre sigue siendo empujada por el corazón hacia la cabeza, y además de esto la atracción de la tierra ejerce su fuerza haciendo que la cantidad de sangre aumente en esta zona. Por este motivo el rostro se pone rojo cuando invertimos de posición,,y en los pies no,ya que el corazon continúa enviando la sangre a la cabeza y ésta deja de ir hacia los pies porque al no existir fuerza de gravedad, todos los líquidos van hacia arriba. En el espacio la sangre se reparte de manera distinta.