Porque la obra la memoria de los seres perdidos se llama asi
carinaestetica Escribir sobre Jordi Sierra i Fabra (Barcelona, 1947) siempre supone un reto y un gran esfuerzo de síntesis porque es imposible condensar en las páginas de un artículo -casi siempre insuficientes- toda la obra y el espíritu de este escritor visceral e intuitivo que nos sorprende a cada paso con sus temas y sus planteamientos. En 1997 se cumplieron sus bodas de plata con la escritura; aunque para él eso, más que un logro, fue, simplemente, un paso más en su evolución personal y literaria. Jordi Sierra i Fabra también es uno de los autores más premiados y considerados en la literatura juvenil española. Por eso el presente estudio enlazará las respuestas de Jordi Sierra i Fabra a las preguntas que le planteamos un día de enero del 2000 con el análisis de algunos de sus temas y constantes.
1. A Jordi Sierra i Fabra se le considera una especie de todo-terreno de la literatura; pero ¿en qué género te sientes más a gusto? “No tengo preferencia absoluta por ningún género, me siento cómodo en todos y soy un todo-terreno literario. Trato de cambiar siempre de registro así que nunca hago dos otras seguidas de un mismo género. Lo que me gusta es escribir”. Y es que Jordi Sierra i Fabra, posiblemente es uno de los pocos escritores actuales -quizás el único- que ha tocado todos los géneros posibles. De la novela de aventuras, a la poesía; de la novela de ciencia ficción al relato más realista; de la novela biográfica a la novela imaginativa. Se trata de un autor intuitivo y “polifacético” que no pierde ninguna ocasión para escribir ni ningún tema ni ningún aspecto que le interese de forma especial porque a este escritor, tremendamente enérgico y apasionado, le motiva todo lo que tenga que ver con el ser humano, aplicando, de forma muy exacta, la máxima clásica de Terencio: “Hombre soy y nada de lo humano me es ajeno”. Cabría también aludir a sus lecturas y a sus influencias literarias. Desde pequeño sintió, de forma autodidacta, la necesidad de leer. Y leía todo lo que caía en sus manos: novelas del Oeste, de gángsters, de marcianos...Confiesa que sus héroes infantiles han sido Guillermo Brown, Tarzán, Flash Gordon y el Capitán Trueno. Comprendemos su capacidad casi camaleónica al escribir, dadas las influencias tan dispares que ha recibido y su arrolladora personalidad.
En 1997 se cumplieron sus bodas de plata con la escritura; aunque para él eso, más que un logro, fue, simplemente, un paso más en su evolución personal y literaria.
Jordi Sierra i Fabra también es uno de los autores más premiados y considerados en la literatura juvenil española. Por eso el presente estudio enlazará las respuestas de Jordi Sierra i Fabra a las preguntas que le planteamos un día de enero del 2000 con el análisis de algunos de sus temas y constantes.
1. A Jordi Sierra i Fabra se le considera una especie de todo-terreno de la literatura; pero ¿en qué género te sientes más a gusto?
“No tengo preferencia absoluta por ningún género, me siento cómodo en todos y soy un todo-terreno literario. Trato de cambiar siempre de registro así que nunca hago dos otras seguidas de un mismo género. Lo que me gusta es escribir”.
Y es que Jordi Sierra i Fabra, posiblemente es uno de los pocos escritores actuales -quizás el único- que ha tocado todos los géneros posibles. De la novela de aventuras, a la poesía; de la novela de ciencia ficción al relato más realista; de la novela biográfica a la novela imaginativa. Se trata de un autor intuitivo y “polifacético” que no pierde ninguna ocasión para escribir ni ningún tema ni ningún aspecto que le interese de forma especial porque a este escritor, tremendamente enérgico y apasionado, le motiva todo lo que tenga que ver con el ser humano, aplicando, de forma muy exacta, la máxima clásica de Terencio: “Hombre soy y nada de lo humano me es ajeno”.
Cabría también aludir a sus lecturas y a sus influencias literarias. Desde pequeño sintió, de forma autodidacta, la necesidad de leer. Y leía todo lo que caía en sus manos: novelas del Oeste, de gángsters, de marcianos...Confiesa que sus héroes infantiles han sido Guillermo Brown, Tarzán, Flash Gordon y el Capitán Trueno. Comprendemos su capacidad casi camaleónica al escribir, dadas las influencias tan dispares que ha recibido y su arrolladora personalidad.