Desde la proclamación de la República y, sobre todo, desde la victoria de la coalición de izquierdas del Frente Popular, en febrero de 1936, se había iniciado en España un proceso de revolución democrática que ponía en peligro los intereses y privilegios de las fuerzas tradicionalmente dominantes:
la oligarquía agraria y financiera, la Iglesia y el ejército. Para impedirlo propiciaron varias insurrecciones para derribar el régimen legalmente constituido.
Con este fin, un sector del ejército llevó a cabo, el 18 de julio, un golpe militar que fracasó por la movilización popular y se convirtió en una guerra civil que dividió España en dos zonas que se enfrentaron trágicamente hasta 1939.
Respuesta:
Desde la proclamación de la República y, sobre todo, desde la victoria de la coalición de izquierdas del Frente Popular, en febrero de 1936, se había iniciado en España un proceso de revolución democrática que ponía en peligro los intereses y privilegios de las fuerzas tradicionalmente dominantes:
la oligarquía agraria y financiera, la Iglesia y el ejército. Para impedirlo propiciaron varias insurrecciones para derribar el régimen legalmente constituido.
Con este fin, un sector del ejército llevó a cabo, el 18 de julio, un golpe militar que fracasó por la movilización popular y se convirtió en una guerra civil que dividió España en dos zonas que se enfrentaron trágicamente hasta 1939.