El “afán” del ser humano por saber nace de un instinto por conocer, que deriva de la necesidad de tener habilidad para la supervivencia, y este sentimiento ser ha desarrollado hasta el punto de generar todo un modo de vida y la mejora considerable de nuestra especie llevándola a la dominación absoluta del medio donde vive.
Ese método de evolución ha creado en los descendientes una necesidad casi imperiosa, de búsqueda por el saber sea de lo que sea y de distintas intensidades.
Para la humanidad este proceso aun va en crecimiento y desarrollo, hay aun muchos elementeos que combaten esta sensación llenándolo con respuestas vacias y llenas de prejuicios.
La necesidad del saber es algo que nos ha definido y dado el privilegio de comprender nuestro entorno y nuestras fuerzas y debilidades y ha dejado su huella en la tecnología de la que disfrutamos actualmente.
El “afán” del ser humano por saber nace de un instinto por conocer, que deriva de la necesidad de tener habilidad para la supervivencia, y este sentimiento ser ha desarrollado hasta el punto de generar todo un modo de vida y la mejora considerable de nuestra especie llevándola a la dominación absoluta del medio donde vive.
Ese método de evolución ha creado en los descendientes una necesidad casi imperiosa, de búsqueda por el saber sea de lo que sea y de distintas intensidades.
Para la humanidad este proceso aun va en crecimiento y desarrollo, hay aun muchos elementeos que combaten esta sensación llenándolo con respuestas vacias y llenas de prejuicios.
La necesidad del saber es algo que nos ha definido y dado el privilegio de comprender nuestro entorno y nuestras fuerzas y debilidades y ha dejado su huella en la tecnología de la que disfrutamos actualmente.