Es lógico, aumenta la actividad cardiaca y con ello el corazón bombea con una fuerza mayor la sangre. Y por cuestiones de fisiología y de anatomía, a donde primero se bombea esta sangre y con mayor fuerza, es la cabeza, a través de las arterias carótidas que se dilatan al máximo enviando a la cabeza y cerebro, sangre que es rica en oxígeno a causa del aumento de la actividad respiratoria. Y esta congestión sanguínea, obviamente dilata los vasos capilares de la piel de toda la cara. Si eres una persona de piel blanca, el sonrojo de tus mejillas es bastante notorio. Pero esto es completamente normal en las personas de todas las razas, además esta actividad es muy saludable para tu cara, porque se oxigenan las células de tu piel.
Cuando corremos, los músculos necesitan un mayor aporte de oxígeno. El cual es transportado por la circulación sanguínea. para lograr este objetivo, el corazón aumenta su ritmo cardíaco.
La sangre al circular a mayor velocidad y presión ocasiona que llegue más sangre a los capilares dando la tonalizadad rojiza a nuestra peil. Todo esto aumenta nuestra temperatura, por ello las glándulas sudoríparas se activan tratando de regular la temperatura y entonces sudamos.
Es lógico, aumenta la actividad cardiaca y con ello el corazón bombea con una fuerza mayor la sangre. Y por cuestiones de fisiología y de anatomía, a donde primero se bombea esta sangre y con mayor fuerza, es la cabeza, a través de las arterias carótidas que se dilatan al máximo enviando a la cabeza y cerebro, sangre que es rica en oxígeno a causa del aumento de la actividad respiratoria. Y esta congestión sanguínea, obviamente dilata los vasos capilares de la piel de toda la cara. Si eres una persona de piel blanca, el sonrojo de tus mejillas es bastante notorio.
Pero esto es completamente normal en las personas de todas las razas, además esta actividad es muy saludable para tu cara, porque se oxigenan las células de tu piel.
Cuando corremos, los músculos necesitan un mayor aporte de oxígeno. El cual es transportado por la circulación sanguínea. para lograr este objetivo, el corazón aumenta su ritmo cardíaco.
La sangre al circular a mayor velocidad y presión ocasiona que llegue más sangre a los capilares dando la tonalizadad rojiza a nuestra peil. Todo esto aumenta nuestra temperatura, por ello las glándulas sudoríparas se activan tratando de regular la temperatura y entonces sudamos.
Saludos,
jvilchez