La sagrada Escritura y los santos Padres están en una íntima conexión. Muchos de ellos han sido discípulos directos de los Apóstoles, por lo que recibieron de forma casi directa el mensaje de Cristo; otros han desarrollado una importante labor de defensa de la Fe frente a las persecuciones de Imperio Romano, o han protegido la doctrina ortodoxa en la confrontación con las diversas herejías que dio casa siglo, permitiendo un mayor y mejor conocimiento de la Revelación.
La sagrada Escritura y los santos Padres están en una íntima conexión. Muchos de ellos han sido discípulos directos de los Apóstoles, por lo que recibieron de forma casi directa el mensaje de Cristo; otros han desarrollado una importante labor de defensa de la Fe frente a las persecuciones de Imperio Romano, o han protegido la doctrina ortodoxa en la confrontación con las diversas herejías que dio casa siglo, permitiendo un mayor y mejor conocimiento de la Revelación.