La estructura del hielo, forma un retículo que ocupa más espacio y es menos denso que el agua líquida. Cuando el agua se enfría, se contrae su volumen, como sucede en todos los cuerpos, pero al alcanzar los 4ºC cesa la contracción y su estructura se dilata hasta transformarse en hielo en el punto de congelación. Por eso el hielo es menos denso que el agua y flota sobre ella. Cuando las moléculas de agua están frías y quietas, los débiles enlaces del hidrógeno las mantienen constantemente a una distancia fija.
La densidad del hielo es menor que la del agua líquida porque, las moléculas de agua están formadas por dos átomos de hidrógeno unidos a un átomo de oxígeno, es decir, H2O. Puesto que el oxígeno es más electronegativo que el hidrógeno, atrae más intensamente el par de electrones a sí mismo, creando una región con mayor carga eléctrica en la molécula. Con eso, la molécula de agua es polar, con una región parcialmente negativa y otra positiva.
Cuando el agua está en estado líquido y a temperatura ambiente (cerca de 20 °C) su densidad es aproximadamente igual a 0,99 g/cm3. Ella alcanza su densidad máxima en aproximadamente 4 °C, que es de 1,000 g/cm3. Pero cuando pasa para el estado sólido, con temperaturas de 0 °C o menos, su densidad disminuye para cerca de 0,92 g/cm3.
La estructura del hielo, forma un retículo que ocupa más espacio y es menos denso que el agua líquida. Cuando el agua se enfría, se contrae su volumen, como sucede en todos los cuerpos, pero al alcanzar los 4ºC cesa la contracción y su estructura se dilata hasta transformarse en hielo en el punto de congelación. Por eso el hielo es menos denso que el agua y flota sobre ella. Cuando las moléculas de agua están frías y quietas, los débiles enlaces del hidrógeno las mantienen constantemente a una distancia fija.
La densidad del hielo es menor que la del agua líquida porque, las moléculas de agua están formadas por dos átomos de hidrógeno unidos a un átomo de oxígeno, es decir, H2O. Puesto que el oxígeno es más electronegativo que el hidrógeno, atrae más intensamente el par de electrones a sí mismo, creando una región con mayor carga eléctrica en la molécula. Con eso, la molécula de agua es polar, con una región parcialmente negativa y otra positiva.
Cuando el agua está en estado líquido y a temperatura ambiente (cerca de 20 °C) su densidad es aproximadamente igual a 0,99 g/cm3. Ella alcanza su densidad máxima en aproximadamente 4 °C, que es de 1,000 g/cm3. Pero cuando pasa para el estado sólido, con temperaturas de 0 °C o menos, su densidad disminuye para cerca de 0,92 g/cm3.